Una nueva investigación presentada en el 29º Congreso de la Academia Europea de Dermatología y Venereología (EADV, por sus siglas en inglés) ha evidenciado que a pesar de las restricciones por el COVID-19, el diagnóstico de las infecciones de transmisión sexual (ITS), incluyendo la gonorrea, la sífilis secundaria y el micoplasma genital, han aumentado.