Los sindicatos del Centro Penitenciario de Topas han denunciado una nueva agresión a un trabajador que, incluso, ha tenido que ser atendido en un centro médico. Así, según relatan, el suceso se produjo al tratar de impedir la salida de un interno del módulo residencial en el que se encontraba. Cuando el trabajador trató de impedirlo sujetando al interno, este reaccionó de manera violenta.
Como resultado el trabajador ha tenido que ser atendido en un centro hospitalario de una fractura en una mano y se encuentra de baja médica. El interno ha sido conducido al departamento de aislados. Se trata esta de la segunda agresión que sufre un trabajador del centro en menos de un mes.
Y es que hace menos de tres semanas otro trabajador, cuando trató de impedir que un interno se autolesionase y que, incluso, pudiera perder la vida, también fue agredido en la mano por la que también tuvo que ser atendido en un centro médico y actualmente se encuentra de baja laboral.
Según comentan desde los sindicatos, "hechos como estos, que dos trabajadores de un mismo grupo de trabajo vayan a estar de baja por agresiones, dejan a los grupos de trabajo, que ya de por si padecen la falta de efectivos, en una situación más que precaria".