Pequeño susto el que se llevaron los vecinos de la calle Alfonso Peña este lunes. A primera hora de la mañana, la carga de una pequeña máquina del servicio de limpieza que aspira la suciedad de la calzada comenzó a arder. Rápidamente, las llamas comenzaron a generar una densa humareda que se coló por las ventanas de las viviendas ubicadas junto a la estación de autobuses.
Afortunadamente, la carroceta poseía un extintor que utilizó el conductor para poder apagar el fuego y evitar así que el vehículo quedase carbonizado. De esta forma, tampoco fue necesaria la presencia de los bomberos en la zona.