En torno a las diez y media de la noche, los vecinos de la calle Antón de Centeneraveían con asombro como media docena de agentes de la Policía Nacional y la Policía Local se acercaban a las proximidades del portal número 16 de esta vía de la capital. Los agentes aparcaban sus vehículos y entraban en el inmueble.
En principio, y según trascendía posteriormente por las declaraciones de fuentes vecinales, la intervención respondía a un intento de mediación de un ajuste de cuentas que se había producido entre dos varones.
Al parecer un hombre había irrumpido en el piso reclamando al dueño de una de las viviendas una cantidad económica. Ante la respuesta negativa le propinó un cabezazo y le rompió la nariz, lo que obligó a los servicios sanitarios a trasladarle al Complejo Asistencial de Zamora para ser atendido.
Una hora después, los agentes abandonaban el lugar acompañados del individuo que había acudido a la zona a reclamar esa cantidad económica. No se produjeron detenciones ni tampoco se interpusieron denuncias.