Los bomberos de la capital recibían este pasado domingo por la noche una llamada que advertía de unos desprendimientos en la torre de la iglesia de San Vicente de la capital zamorana. Ante la advertencia, acudía al lugar el camión escala para inspeccionar la zona.
Tras acordonar el lugar, los bomberos comenzaban su trabajo, saneando la parte afectada para tratar de asegurarse que no se desprenderían más trozos de ese punto. Pese a que la actuación se produjo al filo de la medianoche, fueron varios los viandantes que se detuvieron para ver el trabajo de los bomberos.
Hay que apuntar que no es la primera vez que los bomberos deben acudir a este punto para actuar por desprendimientos, ya que en los últimos meses han sido varios los avisos recibidos por el cuerpo de bomberos para revisar fachadas y cornisas de este templo.
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