El adolescente de 16 años acusado del asesinato de Leticia Rosino el pasado mes de mayo en Castrogonzalo era juzgado en Zamora este jueves. El menor llegaba al Juzgado de Menores segundos antes de las nueve y media de la mañana envuelto en un importante operativo de seguridad con casi una veintena de agentes de Policía Nacional. Tras la tensión de los primeros instantes, el acusado acudía a la sala del juicio para declarar. Según el abogado de la familia de Leticia Rosino, el adolescente reconocía los hechos tanto el de agresión sexual como el de asesinato.
El juicio empezaba a las diez y cuarto de la mañana y a las once y media ya estaba visto para sentencia. Una sentencia que debe llegar en el plazo máximo de diez días. Posteriormente, las partes podrán apelar si lo estiman oportuno ante la Audiencia Provincial, pero una vez confesado y aceptadas casi todas las situaciones por parte del acusado, no parece que esa vía se vaya a agotar.
La Fiscalía de Menores pedía la máxima pena contemplada para los delitos cometidos por menores en la actual Ley del Menor, de ocho años de internamiento en régimen cerrado y cinco más en libertad vigilada. Una máxima pena a la que el abogado de la familia añadía alguna situación más a mayores, principalmente que en el tiempo que dure la libertad vigilada el adolescente, que ya será mayor de edad, también tenga una orden de alejamiento para que no pueda acudir a las localidades en las que residan los familiares de Leticia Rosino, principalmente Tábara y Castrogonzalo. Igualmente se solicita una indemnización de más de doscientos mil euros.
Si finalmente recibe una medida de reclusión, como será el caso, la cumplirá en un centro de menores hasta que cumpla 18 años, momento en el que el juez decidirá si debe ingresar en prisión o seguir en el centro de menores. Es a partir de los 21 años cuando un menor internado debe abandonar de forma obligada un centro de menores para ingresar en un centro penitenciario.