El Servicio de Emergencias de Castilla y León recibía un aviso este viernes a las cuatro menos cuarto de la tarde alertando de que se había declarado un incendio forestal en un terreno en el término municipal de Rabanales. En la llamada no se alertaba de que las llamas pudieran afectar ni a núcleos habitados ni tampoco a vías de comunicación.
Ante el aviso, la sala de operaciones del 1-1-2 pasaba la indicación a Medio Ambiente y a la Guardia Civil. El incendio habría comenzado en unos terrenos que pese a la época del año en la que estamos todavía se encuentra seco por la falta de lluvias. La rápidaactuación de los agentes medioambientales resultó vital para minimizar los daños. Igualmente, participó para controlar las llamas un helicóptero desde la base de Villardeciervos.
La técnica utilizada para evitar que el fuego se expandiese, según explican desde la Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla y León, fue la del contrafuego.
Poco después, en torno a las cinco de la tarde, se declaraba otro incendio forestal en la localidad de Matellanes, también dentro del municipio de Rabanales. En ese caso actuaron dos agentes medioambientales y una ELIF para frenar el avance de las llamas.