La Policía Nacional ha detenido en Salamanca a una mujer a la que se le acusa de un presunto delito de estafa, y que además se desplazó de Zamora -lugar donde reside- a la ciudad charra en pleno estado de alarma, algo totalmente prohibido. En el momento del arresto, producido a las puertas de una empresa de reparto, llevaba junto a sí dos paquetes adquiridos de manera fraudulenta.
La investigación se inició en Coslada (Madrid), donde una persona denunció una estafa que se había cometido a través de internet. El denunciante compró dos productos vía online y, aunque los pagó, le reclamaron una tasa de 1,60 euros para formalizar la entrega, facilitándole un enlace en el propio correo electrónico en el que introducir sus datos.
Una vez metió los datos de su tarjeta de crédito, le llegó un código de verificación al móvil, algo que también introdujo en la página. Sin embargo, minutos después se dio cuenta de que en el mismo mensaje la cantidad que se le reclamaba -y que, por tanto, había abonado- era de 1.142 euros, por lo que decidió anular la tarjeta e ir a denunciar.
Agentes de la Comisaría de Coslada, una vez recibieron la denuncia por estafa y cargos indebidos en tarjeta de crédito, comprobaron que el cargo se debía a una compra online de un móvil valorado en la cantidad citada y que sería enviado por una agencia de paquetería a Salamanca.
El Cuerpo de Policía Nacional de Coslada contactó con el de Salamanca, que a su vez realizó gestiones con el establecimiento donde iba a ser entregado el paquete para que les avisasen cuando el teléfono llegase. De hecho, no sólo llegó un paquete, sino que fueron dos, según comunicó la empresa a la Policía.
Fue entonces cuando los agentes establecieron un dispositivo cerca del establecimiento y, cuando la mujer recogió los paquetes, fue interceptada por la Policía. Al preguntarle por los paquetes, la mujer dio “explicaciones vagas y difusas”, asegurando que no eran suyos sino de una amiga que le había pedido que los recogiera.
Además, en su documentación observaron que era de Zamora, y le preguntaron si había algún otro motivo para que hubiera venido desde allí, ya que la movilidad entre provincias está prohibida, obteniendo como respuesta que se había desplazado para recoger los paquetes.
Ante los hechos anteriormente expuestos, los agentes procedieron a la detención de la mujer, siendo informada verbalmente de los hechos que se le imputan y procediendo a su traslado hasta dependencias policiales, para continuar con los trámites oportunos.
Los dos paquetes ha sido intervenidos y, si bien de uno de ellos se tiene conocimiento que es una adquisición fraudulenta, del otro se están realizando las gestiones oportunas para determinar su procedencia. Ambos contienen terminales de telefonía.
La detenida es una mujer de unos 40 años de edad, nacida en Marruecos, que se encuentra en situación regular en nuestro país. Fue puesta a disposición judicial y, tras prestar declaración, ha sido puesta en libertad con cargos.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios