Los fuertes vientos que están azotando la capital zamorana este miércoles se han traducido en dos intervenciones de los bomberos a lo largo de la mañana y de primera hora de la tarde. En ambos casos fueron llamadas que alertaban de desprendimientos en fachadas o cornisas y afortunadamente no generaron ningún tipo de daño personal.
No obstante, como siempre que se producen este tipo de casos, los bomberos acuden al lugar para cerciorarse de la magnitud del desprendimiento. En el caso del Veterinario Reina, los bomberos acudieron a la zona y cortaron la calle al tránsito de vehículos y también la acera del edificio afectado para los peatones, para evitar que un nuevo desprendimiento en los trabajos de saneado de fachada pudiera generar algún daño personal.
En este caso fue el desprendimiento de parte de la cornisa lo que movilizó a los bomberos al caer a la vía pública como consecuencia de las fuertes rachas de viento.