El día 11 de Septiembre, Agentes de la Comisaría Provincial de Policía Nacional de Zamora, pertenecientes al Grupo de Juego, ha desarticulado un local de juego clandestino situado en la calle Campo de Marte.
Por informaciones obtenidas por los agentes se pudo concretar que a ese local sólo accedían personas a partir de las 20:00 horas, y que en el mismo se estaría jugando al póker.
Realizadas las comprobaciones pertinentes, se procedió a realizar la entrada en el local la noche del día 11 de Septiembre, y se confirmó que el local albergaba todo lo necesario para el juego (mesa, útiles de juego, refrescos, bebidas alcohólicas, etc…)
En el momento de la entrada, SIETE personas estaban jugando una partida, las cuales fueron identificadas. Entre ellos se encontraba el organizador de la misma. A todos ellos se les comunicó que iban a ser sancionados acorde a la Legislación Reguladora del Juego y Apuestas de Castilla y León (Ley 4/98 de 24 de Junio)
El artículo 5 esa Ley expresa que «se consideran prohibidos aquellos juegos y apuestas que no estén incluidos en el catálogo». En ese catálogo no se encuentran el póquer, el bacarrá, los dados o el black-jack, juegos a los que sólo se puede jugar en casinos, los únicos establecimientos autorizados para ello.
Las Actas de Infracción confeccionadas y el material intervenido han sido puestos a Disposición de la Dirección Técnica del Área de Juego de la Junta de Castilla Y León, que es el organismo competente para la determinación de la cuantía de la sanción.
Policía Nacional vela porque el juego sea seguro y los jugadores actúen de un modo responsable. Para ello existe el Servicio de Control de Juegos de Azar y Apuestas dentro de la Unidad Central contra la Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría General de Policía Judicial.
El Servicio de Control de Juegos de Azar, mediante los Grupos de Juego repartidos por todo el país, inspecciona locales, salones de juego, casinos y bingos.
Para lograr que el juego sea seguro y se haga de forma responsable, la Policía Nacional se encarga de verificar que se cumple el control de acceso a los locales de juego, de modo que no pueda entrar nunca un menor en uno de estos lugares y, por supuesto, que no pueda jugar.