Los bomberos de la capital recibían este martes por la tarde una llamada de un vecino que alertaba de que un gato había quedado atrapado en la parte del motor de un coche estacionado en la calle Candelaria Ruiz del Árbol. Ante el aviso, acudía a la zona una dotación compuesta por cuatro bomberos.
Al llegar al lugar, los bomberos vieron que el gato se encontraba encajado en la parte del motor, ya que podían escucharse los aullidos, aunque se hacía muy complicado mantener un contacto visual con él al estar oculto por varias partes del vehículo.
Para su rescate, dos bomberos se colocaron detrás del vehículo, otro en un lateral con una bombona de aire para intentar que el gato hiciese algún movimiento para quedar liberado y otro con una red en el lado opuesto para tratar de recogerlo.
La operación llamó la atención de varios paseantes que atravesaban la zona y que quisieron comprobar si la operación tenía final feliz.