El colegio Juan XXIII, asaltado por los ladrones

Revuelo en la comunidad educativa del colegio Juan XXIII. A primera hora de la mañana, los alumnos que llegaban al centro para participar en el programa de madrugadores se encontraban con un importante despliegue policial que en un primer momento hizo saltar la voz de alarma entre los padres. El motivo de ese despliegue era el robo durante la noche de la caja fuerte del director y de una suma de dinero procedente de la provisión de fondos del AMPA. 

Ante los trabajos de recabar datos, recopilar posibles huellas y reconstruir el lugar de los hechos, los agentes decidieron que los alumnos que acudían al turno de madrugadores aguardasen en el gimnasio. No sería hasta la llegada de todos los estudiantes cuando la normalidad llegaba al centro educativo. Pese a todo, y a que las clases se llevaron a cabo con regularidad, los agentes siguieron durante varias horas inspeccionando diferentes estancias del colegio, sobre todo puertas y cerraduras forzadas o directamente reventadas. 

Durante toda la jornada, la noticia ha circulado rápidamente por los grupos de mensajería instantánea que poseen los padres de los alumnos para enviar comunicaciones.