Importante revuelo el que se generaba este lunes en la calle Sor Dositea Andrés cuando aparecían en la zona una dotación de bomberos, una patrulla de la Policía Local y una ambulancia. Los vecinos del lugar y sobre todo muchos viandantes y familias que se encontraban en el parque cercano se acercaron a seguir con expectación las operaciones de los servicios de emergencia.
Los bomberos recibían el aviso pasadas las seis y cuarto de la tarde que advertía que una mujer se había caído en su casa y podía haberse roto la cadera. El marido, que estaba fuera y pretendía acceder al interior de la vivienda, no pudo entrar debido a que la llave estaba puesta por dentro, lo que impedía el acceso normal. Ante eso, los bomberos tuvieron que actuar para abrir la vivienda y dar paso a los servicios sanitarios.
Los médicos atendían a la mujer, de avanzada edad, y la trasladaban al hospital para conocer el alcance de la lesión para certificar si finalmente tenía o no la cadera rota. Además, al lugar también acudió una patrulla de la Policía Local.