Último domingo de abril y la tradición marca que los fieles romeros alistanos y portugueses celebren la romería en honor a Nuestra Señora la Virgen de la Luz. Este año el buen tiempo fue el afortunado protagonista.
El bullicio de miles de vecinos de las comarcas de una parte y de otra de la ‘raya’, unido a los muchos visitantes que no quieren perderse cada año esta romería entre culturas, quedó multiplicado exponencialmente gracias a las temperaturas primaverales. El hecho de que fuera domingo electoral apenas se notó y el ambiente fue de los mejores que se recuerdan en los últimos años.
Los puestos que se colocaban a los lados del recorrido llevaron a cabo su actividad de manera normal en esta localidad alistana que recibió a cientos de visitantes.
Los actos religiosos se iniciaron el sábado en la freguesía de Constantim, cuyos feligreses subían en procesión hasta la ermita acompañando a la Virgen de la Luz. Este domingo, y con la compañía del sol y las agradables temperaturas, la cofradía portuguesa de Nossa Senhora da Luz abría las puertas del templo facilitando el continuo peregrinar de visitantes.