En busca de confeccionar una asociación cultural en Roales del Pan, un grupo de vecinos de esta localidad se pusieron en marcha para realizar todos los trámites necesarios y conseguir la creación del grupo llamado 'Ubuntu'.
Sin embargo, las quejas no han tardado en llegar y se han hecho públicas a través de la denuncia de los "oídos sordos" recibidos por parte del Ayuntamiento, En estos momentos, dos meses y diversos escritos después reclamando una reunión con el equipo de Gobierno, no han recibido respuesta algo más allá del "absoluto silencio e indiferencia". Una postura que ha despertado la queja del grupo vecinal y que ha recalcado que desde el primer momento explicar a la corporación municipal su intención de reunirse para exponer ciertos asuntos con ello.
Además, en sus peticiones para utilizar el salón municipal también han contado con problemas. En un primer momento, según señalan, un empleado del Ayuntamiento les trasladó que "no lo estaban dejando y que lo tendrían que preguntar al señor alcalde". Tras tratar contactar con él a través de un mensaje por la aplicación WhatsApp recibieron una llamada telefónica del empleado público haciéndoles llegar que "por protocolo COVID-19" no se permitían reuniones en este lugar. No obstante, los propios vecinos recalcan que una semana antes se realizó una reunión municipal con cargos políticos y con un mayor número de personas de las siete solicitadas por su parte.
Después de todo ello han mantenido sus registros de peticiones para reunirse y han continuado solicitando el uso del salón municipal, recibiendo únicamente "silencio" por parte del equipo de Gobierno, tal como denuncian.
En su afán por sacar adelante el proyecto, estos vecinos cuentan con los estatutos, los libros, el acta fundacional que oficializarán en pocos días, el seguro y la gestoría y están trabajando en la página web, con la única falta de una dirección para ubicar la asociación y para la que esperan la cesión de algún local en desuso del Ayuntamiento. El colectivo considera "justa y legítima" su petición y recalcan que otros grupos tampoco cuentan con un espacio y que podrían compartirlo para aunar esfuerzos y lograr "más objetivos".
Por otro lado, mantendrán sus peticiones para utilizar el salón municipal para diferentes actividades que llevarán a cabo, lugar que según explicó el alcalde y recuerdan ahora desde este grupo, el año pasado se adaptó al protocolo COVID-19. Asimismo, remarcan que en caso de no recibir la ayuda y apoyo necesario lo buscarán en otros lugares
"Desde luego, está claro que el proyecto para la Asociación Cultural del pueblo será una realidad más pronto que tarde, porque la voluntad de llevarlo delante de estos vecinos es firme", exponen a la par que esperan un "entendimiento" que se ha dado en "otros asuntos tan importantes o más que este" y donde el "silencio administrativo" no tuvo lugar.