La provincia de Zamora se encuentra sumida en la época de romerías este año truncadas por la crisis sanitaria. Este ha sido el caso de la localidad de Toro donde los fieles han guardado estrictas medidas de seguridad sin perder la devoción por su patrón, el Cristo de las Batallas.
Pese al cierre de la Pradera del Cristo, las puertas del templo se abrieron para que los toresanos pudieran venerar a la imagen en estos tiempos tan difíciles. Tanto la propia Cofradía, como el párroco de la localidad contaron con la ayuda de Protección Civil de Toro para salvaguardar las medidas sanitarias.