La Junta de Castilla y León presentó el pasado miércoles su plan de desescalada al Gobierno central. Una hoja de ruta que contempla la desescalada por Zonas Básicas de Salud. Más de 170 pueblos serían sensibles a este nuevo paso a la normalidad, en el caso de ser aprobadas. Carbajales de Alba y Porto de Sanabria son dos de las localidades que esperan a la Fase 1, hablamos con sus alcaldes para conocer cómo se ha recibido la noticia y cómo se afronta este nuevo paso.
La localidad de Carbajales de Alba, además de su posible desescalada, es el primer municipio de la provincia que registra cero casos activos. Su alcalde, Roberto Fuentes, se muestra "optimista antes estos datos: "Hemos cumplido a rajatabla las medidas, y así se va a seguir haciendo. Desde el Ayuntamiento se ha proporcionado medidas de seguridad, y a día de hoy estamos organizando los bares y los comercios ante esta posible desescalada".
El alcalde de la localidad explica que ante esta nueva Fase 1 "se mantendrán todas las medidas, tanto geles desinfectantes como el uso obligatorio de mascarilla para acceder a los lugares públicos". Fuentes admite además que esta nueva fase se afronta con responsabilidad, "pero sería la Fase 2 la que puede complicar las cosas con la libre movilidad del resto de lugares, ya que, si la gente no respeta, vamos a tener un problemón gordo".
Si recorremos más de 150 kilómetros, llegamos a la Alta Sanabria, más concretamente a Porto de Sanabria, donde su alcalde, Francisco Blanco apela también al "optimismo y la cautela" como armas de este desconfinamiento. "Estamos limpios y la gente está más tranquila y relajada, pero obviamente preocupada por la situación actual", relata el alcalde del municipio a quien el confinamiento le sorprendió en Zamora y ha podido volver a la localidad tras un mes y medio.
"La Fase 1 va a permitir mayor movimiento de la población, se ha repartido la cuarta remesas de mascarillas, y la gente está siendo responsable", pero pese a ello "las limitaciones seguirán estando. Por ejemplo, en Porto la leña es muy importante ya que a muchas familias les hace falta para la calefacción y para poder cocinar y aún no está permitido, aunque atender a los huertos sí".
"Ahora prima la responsabilidad de cada uno. El nivel de envejecimiento de la población es muy alto, y están preocupados, como es normal, pero el confinamiento se ha realizado con mucha precaución y responsabilidad. Es una buena noticia-la posible desescalada- pero hay que tener cautela una vez se permita el movimiento en el resto de la provincia".