¿Cómo ha sido la adaptación al cargo?
Es un trabajo completamente distinto al que yo tenía hasta ahora. En Madrid era un trabajo mucho más anónimo en la provincia y tienes menos visibilidad de cara a la ciudadanía; mientras que ahora como presidenta de la Diputación estás más en primera línea. Yo nunca había tenido un puesto político de primera línea y el único ‘pero’ que le puedo poner es que esa primera línea la acaban padeciendo mis familiares.
¿Y qué balance hace de estos meses?
El balance no puede ser más positivo. El trabajo nunca me ha asustado. Si alguna vez no había trabajo suficiente me lo he buscado. Es un trabajo distinto pero estoy muy contenta porque tenemos una provincia muy buena, unos alcaldes muy trabajadores y muy responsables.
Habla de alcaldes trabajadores y responsables, ¿cómo es la relación con los alcaldes de Zamora, Benavente, Toro o Morales del Vino que no tienen las mismas siglas políticas que usted defiende?
La relación se marca dentro de la normalidad, dentro de la cooperación que tiene que haber entre la Diputación y el resto de Ayuntamientos. Con Zamora capital no tenemos tanta relación en ese sentido al tener la ciudad más de veinte mil habitantes, pero cuando hemos tenido que sentarnos a hablar o a negociar por el bien de todos los zamoranos se han conseguido acuerdos. Y es que los ciudadanos tampoco lo entenderían de otra manera. Y a partir de ahí, para mi todos los municipios son importantes, incluso quizás los que son más pequeños son hasta más importantes porque tienen más necesidades. Es normal que cada uno tengamos una manera de gobernar o una ideología, pero eso no quiere decir que no nos podamos entender. De hecho, el Alcalde de Toro ha venido en varias ocasiones y el otro día definía la Diputación como la casa de todos los alcaldes, que es lo que es, y estamos colaborando por ejemplo con las Edades del Hombre. La relación está dentro de la normalidad y quizás se le dé más importancia fuera de la que le damos dentro.
Se ha abierto un nuevo panorama político con la creación de muchas formaciones ¿Qué incidencia puede tener eso en la provincia?
Es una situación más notable a nivel nacional, aunque en la provincia también hay formaciones políticas que tienen presencia. Por ejemplo, Ahora Decide no tiene representación en la Diputación pero tiene varios Ayuntamientos. Yo me entiendo con ellos, me reúno con ellos, tienen un representante con el que hablamos. Con los representantes de Ciudadanos la relación es buena. Y también la relación es cordial con los independientes. Yo siempre he dicho que las puertas de mi despacho están abiertas a cualquier alcalde sea del color que sea y se ha demostrado en estos meses. Cuando un alcalde viene en representación de sus vecinos porque tiene un problema aquí le atendemos y no se le mira el color político que tiene. Además, en el Consejo de Alcaldes están todos y tenemos una relación bastante buena.
¿Es usted de las que tolera bien las críticas?
Si la crítica se hace con buena intención y de manera constructiva siempre es positiva. La crítica que se hace con otra idea y de mal estilo no es crítica sino un ataque. Tolero bien las críticas y dialogo bastante, pero siempre que son en positivo. Porque toda crítica buena enriquece. Otra cosa es pasar al terreno personal, porque el respeto es fundamental.
¿Qué recuerdo guarda de su primer Día de la Provincia?
Es un día en el que la provincia se reúne y se une. Tengo un recuerdo muy bonito porque lo hicimos en la finca experimental de Madridanos, que son unas de las instalaciones de la Diputación que más me gustan. Ese es el origen y la razón de ser de la provincia de Zamora: el campo, el ganado, la agricultura… Y además me gustó porque nos juntamos toda la sociedad civil zamorana de distintos sectores. Me gustó que estuvieran presentes todos los diputados de todos los partidos políticos. Me gustó que hubiera representación de alcaldes de todos los partidos políticos. Eso es lo principal, sentir la provincia y hacer provincia. Y ese día debe servir para aparcar las diferencias que podemos tener y coger lo que nos une.