Hace unos días aparecían nueve cadáveres de corderos, de no más de diez días, en un paraje cercano a la localidad zamorana de Villanueva del Campo. Unos hechos que denunciaba su alcalde, Felipe Blanco, quien afirmaba que habían sido arrojados “con prisa desde algún tipo de vehículo” y quedando alguno visible en la anónima cuneta.
Una estampa desalentadora que la Junta de Castilla y León, a través de Leticia García, delegada territorial de la provincia, ha confirmado no tener constancia sobre ello: “No tenemos nada oficial. Estamos esperando a ver si nos llega algo por parte del SEPRONA”, expresó García.