La plataforma change.org alberga desde este martes una petición que persigue arreglar “la reforma chapucera que se hizo en 2010” en la Iglesia de la Asunción/Santa María de Mombuey y su torre, en la localidad zamorana de Mombuey. A partir de ahí, también se solicita el freno de la obra que se está haciendo en 2019 “y que no está cumpliendo con el proyecto asignado”. Igualmente piden que se lleven a cabo “más limpiezas de vegetación de la torre” y que “se deje de desprestigiar al monumento y se trate como lo que es un monumento nacional”.
Los impulsores de esta petición recuerdan que en 2010 se realizan obras, con un presupuesto de 49.999 euros, para erradicar filtraciones y humedades, “se rejuntan las piedras de la torre con mortero de cal blanca que a los pocos años se cae”, afirman. Además, en 2015, “el Ayuntamiento renuncia a pedir el 1,5% cultural de las obras del AVE para acondicionar la torre de la iglesia debido a las condiciones impuestas por Fomento. Según figura en prensa, el Ayuntamiento de Mombuey declara no poder hacer frente al 25% de la inversión, unos 100.000 euros, para ejecutar la totalidad del proyecto, como demanda el Ministerio. La intervención implicaba la remodelación del entorno de la iglesia (sustitución del pavimento y adecuación del perímetro del edificio)”.
Por último, en 2019 se inicia la intervención promovida por la Consejería de Cultura: los escalones de piedra de acceso a la torre aparecían desgastados por el paso de los siglos y se ha añadido hormigón para posteriormente revestir de piedra cada peldaño. Las obras tienen un presupuesto de 42.659 euros del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, y están en fase de ejecución. “Es una salvajada picar la piedra original de sillería de piedra gris verdosa”, argumentaban los detractores locales de la intervención para posteriormente colocar unos escalones nuevos que no son iguales a los que ya había y de distinto color y material y poniendo más escalones de los que había. “No se cumplen las cosas que se ponen en el proyecto que ya en un principio era bastante chapucero”, agregan.
Por último, enumeran los puntos que hacen que este enclave esté en la lista roja: “Caída de elementos ornamentales y, como consecuencia, expolio de los mismos. Desprendimiento del mortero que se aplicó para rejuntar los sillares de la construcción en la restauración de 2010. Presencia de vegetación en los vanos del cuerpo superior, que favorece la filtración de aguas pluviales y aumenta las humedades”.