Mientras todas las piscinas de la provincia han abierto sus puertas o están a punto de hacerlo, la piscina de verano de Morales, gestionada por una empresa privada, sigue en el limbo. Según denuncia la Unión del Pueblo Leonés (UPL), es improbable que esta instalación abra sus puertas este año.
Actualmente, las instalaciones de la piscina de Morales presentan un estado de total abandono, sin ningún indicio de preparación para su apertura. La corporación municipal no ha proporcionado información al respecto, lo que aumenta la incertidumbre sobre su funcionamiento para este verano. "Los vecinos tendrán que desplazarse a otro municipio o a la capital para darse un baño, a pesar de haber costeado unas instalaciones que no pueden usar", declaró Marta Vicente, concejala de la formación regionalista, mostrando su indignación.
Este complejo deportivo, que tuvo un coste superior a los dos millones de euros y que incluye piscina climatizada, gimnasio, sauna y pistas deportivas, permanece cerrado. La alcaldesa del PP, Carmen Lorenzo, no ha encontrado una solución a este problema, resultado de lo que UPL califica como una mala gestión. Marta Vicente ha solicitado explicaciones en varias ocasiones, sin recibir respuesta alguna. Según la portavoz de UPL, la gestión defectuosa del proyecto y la entrega de la gestión a una empresa privada sin garantías plenas han llevado al municipio a una situación económica precaria. Como resultado, los vecinos de Morales se enfrentan a la posibilidad de quedarse sin piscina de verano, tal como han estado sin acceso a la piscina climatizada y otras instalaciones desde antes de la pandemia.
La situación de la piscina cerrada, que ha supuesto un considerable gasto para los vecinos, se ha convertido en un tema recurrente en Morales. Un grupo de residentes ha iniciado una recogida de firmas para exigir al ayuntamiento del PP la apertura de las instalaciones.