El geófono que el Área de Medio Ambiente y del Parque de Maquinaria de la Diputación de Zamora tiene a disposición de los ayuntamientos de la provincia que lo soliciten ha atendido este año 110 servicios, 30 de cuales fueron con carácter urgente.
En 82 de las actuaciones realizadas, la máquina, utilizada con la imprescindible pericia del operario encargado de ella, detectó y localizó fugas en la red de abastecimiento de agua potable en el municipio en cuestión, lo que supone casi el 75 por ciento de los servicios demandados.
Garantizar el suministro de agua potable apta para el consumo humano en todos los hogares de los habitantes del medio rural es una de las prioridades de la Diputación.
El geófono complementa las actuaciones de la Diputación de Zamora destinadas al abastecimiento de agua en localidades que tienen problemas de escasez, contaminación o averías, con la ejecución de las obras y la puesta en marcha de nuevas estaciones de tratamiento y mejora de las existentes, plantas potabilizadoras, depósitos, nuevas captaciones con pozos de sondeo, y obras de mantenimiento y conservación de las redes de distribución, básicamente.
El geófono permite localizar las fugas de agua que una vez solucionadas suponen un importante ahorro para las arcas municipales, tanto en gastos de agua y de electricidad para los ayuntamientos. También contribuye a la protección medioambiental evitando que se desperdicien millones de litros de agua.
Se trata de un sistema modular de escucha electrónica para la localización precisa de fugas de agua en tuberías enterradas.
Detecta el ruido producido por el escape de agua, y se utiliza para dar servicio a los distintos ayuntamientos de la provincia de Zamora para la detección de posibles fugas en las redes de abastecimiento que llevan el agua a los hogares de miles de personas en todos los rincones de la provincia.
El geófono de la Diputación combina dos sistemas para realizar su labor.
El primero de ellos se basa en una sonda electrónica de escucha. Capta el ruido generado por las fugas mediante la escucha directa sobre las válvulas, hidrantes y otras conexiones superficiales de las tuberías. El amplificador personal procesa el ruido detectado por la sonda de mano y transmite la señal a los auriculares.
El segundo sistema utiliza un micrófono de suelo que detecta el ruido generado por las fugas de agua en tuberías enterradas y está equipado con un sensor especial de alta sensibilidad.
La señal captada por el micrófono se trasmite al amplificador que incluye diferentes tipos de filtros para el tratamiento de la señal captada.