El pasado lunes los vecinos de Roales del Pan se topaban de bruces con la noticia de la muerte de su vecina Arancha Corcero, de 24 años. La joven se encontraba paseando por un camino que conecta esta localidad con la de La Hiniesta, lugar en el que fue atacada por una jauría de perros. Los canes pertenecían a un pastor y este jueves era atrapado el último de ellos tras perderse la pista del mismo desde el mismo lunes.
Una manada de perros que en estos momentos están en un centro canino de Simancas a la espera de conocer la decisión del juez, si bien este proceso de cuarenta se realiza siempre que algún perro ataca a un ser humano, buscando conocer si padecen la rabia.
Al respecto de esta cuestión, la presidenta del Colegio de Veterinarios de Zamora, Elena Laguno explica que si bien estos perros pastores suelen ser grandes, no depende de ello que sean peligrosos y todo "depende de la educación" recibida.
"La gente debe ser consciente de los animales", recalca Elena Laguno, haciendo hincapié también en que este tipo de animales "entienden de territorios" aunque "es muy raro que vayan a por ti". Una situación que está investigándose con el punto clave de la llamada que la propia Arancha realizó a su madre ya que, según el alcalde de Roales del Pan, "la chica iba hablando con su madre y por la conversación se deduce que los perros venían a atacar",
Por ello, Laguno sentencia que habría que "conocer las causas", aunque puntualiza que esto no exime que "el pastor debería haber estado supervisando a los animales".
Sentenciando la necesidad de alejarse "cuanto más lejos, mejor" del ganado, la presidenta del Colegio de Veterinarios provincial pone de manifiesto que hay "muy, muy pocas muertes" de este tipo, pero que se contabilizan "muchísimas" agresiones anualmente, debidas muchas de ellas a la territorialidad de los animales.
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