Cerramos los ojos y echamos la vista hacia atrás, ponemos un single de vinilo, ¿lo recordáis? Aquellos singles solían tener dos canciones, una en la cara “A” y otra en la cara “B”. Nos entristece pensar en el disco que desde hace ya 28 años llevamos escuchando en este municipio. Un disco que se ha rallado y cuya aguja salta sin cesar en el mismo punto de la canción.
Seguimos escuchando el mismo sonsonete, el municipio se ha quedado parado en una sintonía rancia, sin ideas y llena de autobombo, que no resuelve los problemas de los vecinos que aquí vivimos y que apostamos por esta tierra.
La cara “A” del disco, está llena de lagunas, solo vemos las luces brillar en el Conjunto Histórico, luces que, por cierto, llegaron a esta villa gracias al apoyo popular en las votaciones de todos nuestros paisanos, que fueron los que realmente consiguieron la gesta a la que se le quiere ahora sacar rendimiento político. Luces que nos ciegan la visión a muchos sinsabores y problemas que siguen sin solventarse.
La cara “A” de este disco hace que la aguja salte en los problemas sin solución de barrios y anejos: el barrio Varela, lleva visos de convertirse en una escombrera pública con aceras intransitables. Ungilde y Robledo siguen reclamando sus aprovechamientos con eternas promesas, que no llegan; Castellanos continúa sin impulso y diálogo para que sea posible la construcción de la rotonda de acceso o si se hace algo, se sigue sin decir qué.
La aguja sigue saltando en un recuerdo reciente, que enturbió, como el agua de nuestros grifos, nuestra entrada en la asociación de “Uno de los Pueblos más Bonitos de España”, sin compensación alguna a los vecinos y sin una sola nota de prensa para la explicación de lo que pasó en la gestión del problema. Llama la atención, que se ponga en el “Bandomóvil” una nota de prensa para explicar un supuesto problema con la conexión a internet en la confección de la declaración de la renta, (enfrentamiento con otras administraciones) pero no se haga constar para un problema tan importante como el que nos ocupó en el verano del 2017, cuando en plena campaña veraniega, en uno de los municipios con más turismo de la provincia de Zamora, se vieron obligados a cerrar muchos establecimientos y derivar a sus visitantes a otros municipios que sí estuvieron atentos a la incidencia y se adelantaron a los acontecimientos. Nos duele pensar que en aquel problema no se aportaron soluciones a los afectados, no se realizaron las devoluciones y compensaciones que creemos necesarias a los vecinos y lo más grave de todo: no se dio una explicación o se pidió perdón. Es importante a veces, reconocer los errores y entonar el “mea culpa”, ya que la responsabilidad última del abastecimiento domiciliario es del ayuntamiento.
En el año 2006, se anunció a bombo y platillo la firma de un convenio urbanístico para la construcción de un centro de servicios para la tercera edad con servicios asistenciales, servicios de residencia y servicios complementarios. En dicho convenio se establecían varias fases y a la postre debería contar con un mínimo de 100 plazas en sus servicios de residencia. 13 largos años han pasado ya, en los que los vecinos hemos visto como se ponían en funcionamiento otras residencias en la comarca, como la de Mombuey (2008) y la de El Puente en (2010) y en los que seguimos sin saber lo que pasado con el terreno donde se incluía la construcción de la residencia. Ahora, el actual gobierno municipal se escuda en que la competencia es de la Comunidad Autónoma y que no es un problema local.
Seguimos sufriendo la oposición a muchas iniciativas empresariales como la mina de Calabor o la finalización en la ejecución del proyecto del polígono, que daría alas a las empresas que se instalarían en nuestro municipio y sí fijarían empleo. Nos preguntamos ¿Qué pasará con la gente que ha encontrado empleo en las obras del tren de alta velocidad y ahora quedan sin trabajo? ¿No sería una buena alternativa para los trabajadores que encuentren empleo en la mina de Calabor o en otras empresas que se afiancen en el polígono?. Sobra decir que las empresas han de cumplir estrictamente la legalidad en materia medioambiental pues todos estamos de acuerdo en que el desarrollo ha de ser sostenible.
Todos estamos orgullosos de nuestro pueblo, todos en mayor o menor medida hemos contribuido e invertido en una apuesta de futuro y juntos hemos hecho de este municipio un referente a nivel provincial, por eso vamos a hablar en positivo.
La cara “B” del disco, ha de incidir en una buena colaboración con otras administraciones, la explicación de todos los trámites realizados para la solución de problemas y el apoyo y la cercanía a los vecinos. Esto se consigue hablando con ellos, tocando a sus puertas y no llamando por teléfono con nocturnidad. Hay que escuchar a la gente, conocer sus problemas y darles una solución de futuro.
La cara “B” debe incluir un compromiso firme para que la residencia de mayores sea una realidad. La apuesta por la búsqueda de empresas que generen empleo estable que permita a nuestros jóvenes seguir apostando por quedarse en nuestro municipio y para que aquellos que decidieron marcharse puedan regresar. Nuevas fórmulas para incentivar el turismo en épocas de baja afluencia. Seguir apostando por un Mercado Medieval de calidad y que el programa navideño se afiance como referencia turística.
Todo ello desde un equipo sin personalismos y con ganas de pelear por una comarca unida y por un proyecto que vertebre una realidad común para que el turismo y los barrios convivan y tengan el mismo protagonismo.