¿Cuántos profesores hay en el CEIP Entrevalles de San Pedro de Ceque?
Somos tres personas las que estamos de continuo en el centro y luego hay seis profesores que imparten clase en nuestro centro y en otro más. Por lo tanto, somos un equipo docente de nueve profesores.
¿Y cuántos alumnos están en el centro?
En el curso pasado había matriculados quince alumnos.
¿Qué opina de las voces críticas que piden cerrar los centros educativos del mundo rural con pocos alumnos porque cuestan demasiado dinero a la Junta?
Es una opinión respetable y claro que podría hacerse, pero eso supondría desarraigar a los niños de su lugar de origen. Los niños siempre están mejor en su localidad, porque no estarlo genera trastornos en las familias. Es verdad que se puede montar a los estudiantes en un autobús, pero si hay algún problema, los familiares ya tienen que desplazarse para resolverlo. Es cierto que puede salir más caro, pero hay que mirar por los niños y por los pueblos. Vivimos en una provincia eminentemente rural y no podemos pensar solo en la ciudad. Los pueblos tienen su valor, su historia, y la gente debe tener el derecho a elegir donde vivir, donde estudiar y donde recibir los servicios básicos.
¿Qué diferencias encuentra entre la educación en la ciudad y en el mundo rural?
Yo he tenido la suerte de impartir clase en los dos contextos. Estudiar en los pueblos tiene más ventajas de lo que la gente cree. La diferencia fundamental es el número de alumnos y la posibilidad de hacer clases mucho más personalizadas. Le dedicas más tiempo a cada alumno en el mundo rural. A nivel docente, es más exigente a la hora de programar las clases, porque tienes que programar para impartir clase a alumnos que están en la misma clase pero que pertenecen a distintos cursos.
¿Y eso no confunde a los niños?
No. Es más, puede ser hasta muy positivo. Los profesores solemos preparar la clase para ir de menos a más en cuanto a nivel. Así, por ejemplo en clase de matemáticas, explicamos lo que corresponde a los alumnos de Tercero de Primaria y a los de Cuarto, Quinto o Sexto lo utilizan para repasar. Cuando terminamos, el alumno de Tercero empieza con los ejercicios y pasamos a explicar el siguiente nivel. Así, constantemente. Eso también permite que los alumnos que van bien en los estudios puedan incluso alcanzar un nivel superior porque aprovecha las explicaciones dirigidas a alumnos de un curso más.
¿Los padres piden consejo a los profesores a la hora de decidir si sacan del colegio a su hijo para llevarlo a un centro más grande?
A veces sí nos preguntan. Sobre todo cuando los niños, por el motivo que sea, no terminan de ir bien. Piensan que por llevar al niño a un colegio más grande van a mejorar su rendimiento. Y yo personalmente creo que no es así; porque en un centro de la ciudad, por ejemplo, estará con otros veinticinco niños en clase y la atención del profesor no podrá ser tan individualizada. Por eso, en esos casos, siempre recomiendo que el alumno se mantenga en esta dinámica. Porque al final es como estar casi en clases particulares.
Las actividades extraescolares son cada vez más amplias en las ciudades, ¿contra eso se puede competir en los pueblos?
Claro que sí. En el colegio en el que yo trabajo, las tareas de actividades extraescolares las organizamos los maestros y tenemos dos horas cada tarde para realizar talleres de diversas temáticas. Artes plásticas, deportes, actividades de psicomotricidad, lectura…
¿Qué falta en los colegios rurales con respecto a los colegios en las ciudades?
Sinceramente, no se me ocurre nada relevante. Porque en los pueblos hacemos lo mismo que en los colegios grandes: tenemos bibliotecas, ordenadores, en algunos centros también hay servicios de comedores, se realizan actividades extraescolares, se trabaja mucho el fomento de lectura, de las TIC, trabajamos los valores de paz, solidaridad o compañerismo, celebramos las mismas efemérides…
¿Qué papel juega el profesor en una escuela rural?
El maestro tiene que luchar por el medio en el que trabaja. Está claro que la despoblación en el mundo rural es un problema que existe y está ahí, pero nosotros tratamos de potenciar, favorecer y poner en valor todo lo que tiene este medio y todo lo que los alumnos ven a su alrededor. Además, tratamos de aprovechar las ventajas que tenemos, como por ejemplo la posibilidad de aprender sobre el terreno la agricultura, la ganadería y sobre todo las oportunidades que ofrece estar en un entorno de naturaleza.
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