En las últimas horas el alcalde de la localidad de Granja de Moreruela, Juan Carro, conocía la existencia de un positivo en la localidad. Un nuevo caso que eleva la cifra de contagios en los pequeños núcleos de población de la provincia. Esta confirmación ha abierto la puerta a la reivindicación de ignorar la ley de protección de datos para poder poner nombre a los afectados y extremar las medidas de seguridad.
"En el pueblo somos cuatro, y la mayoría personas mayores, se debería comunicar quiénes están infectados para extremar las medidas de precaución", aseguraba el alcalde de la localidad, Juan Carro, tras conocer este primer positivo de un hombre de ochenta años a quien se le hizo la prueba el pasado día 20 de marzo. "Nadie nos garantiza que su mujer no esté contagiada también ya que a él lo han mandado a casa".
"Aunque en el pueblo se sepa quién es, se debería autorizar conocer personalmente los casos para que esas personas no salgan bajo ningún concepto de su domicilio para evitar así el contacto con otros vecinos y que el número siga creciendo". Para el alcalde, esta medida supondría "un salvavidas para aquellos municipios donde el índice de envejecimiento es muy alto".
En el caso de Granja de Moreruela, se han tomado las medidas oportunas, ayudando a la familia afectada con los productos de primera necesidad sin que ellos tengan que salir de casa.
"Su traslado al pueblo se ha conocido con un día de retraso, no lo sabían ni en el centro de salud de Villarrín, se ha solicitado a la delegación territorial que se den a conocer estos casos, porque entendemos que así se salvarían más vidas", ha concluido el alcalde de la localidad, Juan Carro, visiblemente preocupado por la salud de todos los vecinos.
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