El oficial médico especializado de la unidad de envejecimiento y salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hyobum Jang, ha desmentido esta semana en España que exista una recomendación de la OMS de 5 camas en residencias por cada 100 mayores de 65 años.
Así lo aclaró Jang el pasado martes durante el segundo evento público para la elaboración de la 'Estrategia estatal de Desinstitucionalización, para una buena vida en comunidad', que tuvo lugar en la sede del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, en Madrid.
Según precisan desde el Ministerio que dirige Ione Belarra, Hyobum Jang explicó, durante su intervención, que la cifra de referencia que se ha tomado en España por parte de algunos sectores en el ámbito de los cuidados de larga duración de al menos 5 camas por cada 100 personas mayores de 65 años es errónea y en ningún caso se trata de una recomendación de la OMS.
En este sentido, señaló que la confusión se debe a un antiguo estudio realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en 2017 que utilizaba el indicador de 50 camas de cuidados a largo plazo por cada 1.000 personas mayores de 65 años en 2015, sin que esa cifra fuera una recomendación.
Tal y como se puede leer en la presentación del médico de la OMS, recogida por el Ministerio de Derechos Sociales, no hay ninguna recomendación, norma u orientación identificada por la OMS sobre el número recomendado de camas de cuidados de larga duración por población. Tampoco existe, según precisa, una recomendación estándar de la OMS para la densidad de camas hospitalarias.
Además, puntualiza que "por cada 100" no es la unidad habitual de denominador utilizada por la OMS u otras agencias de la ONU, sino que normalmente son 100.000, 10.000 o 1.000 personas.
Entre las recomendaciones que propone el doctor Jang destacan: integrar y coordinar la prestación de asistencia entre la asistencia sanitaria, y centrarse en la calidad de los servicios, no sólo en la disponibilidad o asequibilidad de los cuidados, garantizando que se satisfacen las necesidades y preferencias de las personas mayores y sus cuidadores.
Al mismo tiempo, señala que la atención domiciliaria y comunitaria a través de la desinstitucionalización requiere mucho apoyo de las familias y las comunidades y apunta que las autoridades centrales, provinciales y locales deben proporcionar apoyo y capacitación, y mejorar las condiciones de trabajo de los cuidadores.
En España, tampoco existe una recomendación desde el Ministerio de Derechos Sociales sobre el número de camas en residencias para un determinado número de personas mayores pero sí existe un acuerdo sobre criterios de acreditación y calidad de los centros y servicios del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD).
Este acuerdo sobre el nuevo modelo de residencias fue aprobado el pasado mes de junio de 2022 por el Gobierno y las CCAA, por impulso del Ministerio de Derechos Sociales, y en el mismo se incluyen una serie de medidas que deben cumplirse antes de 2030, con el objetivo de mejorar la calidad de estos centros.
Entre estas medidas, destaca el incremento de las ratios, con un profesional por cada dos residentes en las residencias de mayores; la prohibición de construir residencias muy grandes (con un límite de entre 75 y 120 plazas, dependiendo de la densidad de población); la reestructuración de las residencias públicas y concertadas, de aquí a 2030, en unidades de convivencia de 15 personas; la eliminación de las sujeciones; o el incremento del número de habitaciones individuales (65% del total) en las residencias de nueva construcción, entre otras.
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