El médico acusado de un delito de estafa y falsedad por emitir 268 recetas a nombre de su suegra cuando en realidad los medicamentos eran para sus hijos y su esposa, ha aceptado una condena de un año y ocho meses de prisión, un año de inhabilitación para el ejercicio médico dentro de la función pública, y una multa de 900 euros, según han informado fuentes judiciales.
El acusado ha reconocido los hechos en la vista celebrada este martes en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cantabria, y ha alcanzado un acuerdo con la Fiscalía, que inicialmente solicitó cuatro años y medio de prisión, además de una multa de 6.750 euros e inhabilitación para el ejercicio de empleo o cargo público, profesión u oficio relacionado con la medicina, por un delito continuado de falsedad en documento oficial en concurso con un delito continuado de estafa, con la concurrencia de dos atenuantes: la de confesión y la de reparación del daño.
Las recetas fueron emitidas entre enero de 2013 y marzo de 2017, aprovechando que la aportación al sistema de salud que le correspondía a su suegra era del 10%, mientras que lo que debían pagar su esposa e hijos --a nombre de quienes debieron hacerse las recetas-- supondría el 50% del valor de los fármacos.
Los medicamentos prescritos sumaban un importe de 8.143 euros y el perjuicio estimado es de 3.163 euros, cantidad que ya ha consignado el acusado, que reconoció los hechos antes de que se iniciara el procedimiento judicial.