El jefe del Estado, el rey Felipe VI, aseguró hoy que “España muestra su firme compromiso para ayudar a los ucranianos” ante la nueva crisis derivada de la agresión militar de Rusia. "Sabemos que debemos afrontar nuevas dificultades, que debemos continuar ofreciendo apoyo y amparo", afirmó durante el homenaje a la ejemplaridad del pueblo de La Palma, que se celebró en el claustro del Convento de San Francisco, actual Museo Insular, de Santa Cruz de La Palma.
El acto institucional, presidido por Sus Majestades los Reyes, don Felipe y doña Letizia, se celebró este sábado, después de que se tuviera que cancelar por la agresión de Rusia a Ucrania. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; así como el de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y todos los mandatarios autonómicos, excepto el catalán Pere Aragonés, asistieron a esta cita, que contó con hasta nueve ministros.
En su comparecencia, el rey recordó que este acto se tuvo que suspender el pasado 24 de febrero por los “acontecimientos” vividos en Ucrania, que consideró “totalmente inaceptables”. “Ese día siempre estará marcado en nuestra memoria por el inicio de una guerra sin justificación, contraria a la Carta de Naciones Unidas, que supone una clara violación del derecho internacional, y nos trae la memoria de los peores tiempos pasados”, dijo.
Además, Felipe VI trasladó la “más sincera solidaridad” de los españoles a las autoridades y el pueblo ucraniano cuyo sufrimiento consideró “desgarrador”. Precisamente, consideró que esto debe supone “uno de los mayores valores y fortalezas de nuestra unidad y de nuestra pertenencia a la Unión Europea”. Por ello, abogó por acoger, con los socios europeos, a los refugiados que escapan de la guerra.
En su mensaje al pueblo de La Palma, el rey puso en valor su demostración de “coraje” y “fortaleza” durante los 85 días en que estuvo en erupción el volcán de Cumbre Vieja, que inició su actividad el 19 de septiembre. “No dejamos de pensar en vuestro aguante diario y de comprobar y de admirar la entrega de los profesionales y de los voluntarios en vuestra asistencia”, expresó.
Felipe VI consideró que se convirtieron en un “ejemplo de superación, de fortaleza, de humanidad, de ayuda mutua” y también de “unidad” por el trabajo “incansable” y “extraordinario” de las administraciones, organismos de emergencias y Protección Civil, Fuerzas Armadas, voluntarios y científicos. “Nos unió a todos los españoles sin excepción: porque lo sentimos como algo propio, sufrimos por y con vosotros. Fue una tristeza compartida. Una impotencia colectiva”, dijo.
“Lo que nos unió entonces, debe seguir haciéndolo ahora en esta nueva etapa. Porque el presente y el futuro de La Palma nos preocupa a todos”, afirmó el jefe del Estado, que recordó que la recuperación es un proyecto “colectivo” y una “esperanza compartida”. Además, apuntó a la solidaridad individual y colectiva. “Podéis estar seguros de que seguiremos avanzando juntos, compartiendo esfuerzos y enfrentando los nuevos retos, garantizó.
Para finalizar su discurso, aseguró que el pueblo de la Palma tendrá “siempre” a su lado a los reyes por su “comportamiento ejemplar”, “fortaleza” y “entereza demostrada” por soportar 85 días y ocho horas de lava, ceniza y explosiones, así como los más de 9.000 terremotos, que arrasaron 400 hectáreas de cultivo, sepultaron 70 kilómetros de carreteras y obligaron a evacuar a más de 7.000 personas.
Acto institucional
Pasadas las 17 horas de una tarde con cielo gris, pero con buena temperatura, comenzó el homenaje en el que se interpretó el himno nacional y se leyó por parte de escolares de la zona afectada por el volcán la declaración institucional aprobada por el Consejo de Ministros. Posteriormente, se entregaron las medallas del mérito a la Protección Civil e intervino Felipe VI en el claustro del Convenio de San Francisco.
La actuación del coro de niños y cuarteto de cuerda puso el punto final a este homenaje al pueblo palmero. Previamente, el jefe del Estado quiso visitar de forma privada, tras llegar de Chile, la zona de la Laguna que recorrió cuatro días después de la erupción del volcán de Cumbre Vieja el pasado 19 de septiembre.
Entre los asistentes al acto se encontraban los presidentes de las comunidades, como el presidente del Senado, el burgalés Ander Gil, y Fernández Mañueco, que este domingo, intervendrá en la XXVI Conferencia de Presidentes que se reúne en el Museo Arqueológico Benahoarita de Los Llanos de Aridane.
A su llegada a la plaza de San Francisco de la capital palmera, el presidente en funciones de la Junta fue recibido por el presidente del Parlamento de Canarias, Gustavo Matas; el alcalde de la ciudad, Juan José Neris, entre otros. Ya en el claustro del convento, siguió el acto junto a la presidenta balear, Francina Armengol.