La previsible cadena de ceses de altos cargos tras el asalto de Marta Álvarez a la presidencia de El Corte Inglés en Galicia, se ha cruzado con un caso de acoso sexual en el centro comercial de Santiago que acabó implicando a varios altos cargos de la compañía.
Según informa el diario digital Economía Digital, El Corte Inglés de Santiago ha cesado al jefe de personal de sus grandes almacenes compostelanos, A.Q.; y al jefe de personal en Galicia, F.A. También se ha relevado al director del centro comercial de Santiago, A.B., según confirmaron fuentes de la propia empresa, que no aclararon si continúa vinculado a la compañía. Estos mandos de la dirección gallega se vieron envueltos en un caso de acoso sexual por encubrir o, al menos, no tomar las medidas internas oportunas ante las reiteradas quejas y denuncias de una trabajadora que acabó abandonando la empresa. Esta pasividad llevó a los tribunales a la conclusión de que protegieron al acosador en lugar de a la víctima.
La empresa "evitó enterarse de lo que ocurría", de ello deja constancia una sentencia del Juzgado de lo Social número 1 de Santiago de Compostela, que el 25 de agosto de 2017 concluía que "ningún responsable de la empresa o jefe de personal procedió a realizar una mínima investigación de lo que estaba sucediendo". Y añadía la jueza, citando expresamente a los responsables de la dirección de Santiago y al jefe de personal de Galicia, que "si la empresa no tuvo antes un conocimiento de los hechos más exhaustivo fue porque adoptó una actitud de no querer profundizar en ellos, evitando enterarse de lo que realmente ocurría".
Los despidos se producen ahora debido a que el caso adquirió notoriedad el pasado octubre por la emisión de un programa en La Sexta sobre el acoso sexual en el que la denunciante, M.I.F.R., explicaba la situación que vivió en El Corte Inglés de Santiago y que la llevó a dejar la empresa tras casi dos décadas en plantilla. En el tiempo que transcurrió desde la grabación del programa a su emisión, la compañía cesó al jefe de personal del centro comercial y al jefe de personal de Galicia.
Fuentes del grupo desvincularon la emisión del programa de los despidos en la dirección de Galicia alegando que la decisión se tomó con anterioridad. Atribuyen los cambios a un "proceso natural de renovación" en la vida de cualquier empresa. Al centro comercial de Santiago se incorporó Mónica Álvarez Parada como nueva jefa de personal y Cristina García de Albéniz, anterior subdirectora de El Corte Inglés en Oviedo, como directora.
Frente a la versión de la empresa, fuentes consultadas por este medio señalan que fue la emisión del programa de La Sexta la que precipitó los ceses dos años después de que se confirmara el acoso sexual a una trabajadora. De hecho, el director de recursos humanos de El Corte Inglés, Manuel Pinardo, se reunió con la víctima, ahora ya extrabajadora de la compañía, en el hotel Tryp de Santiago el pasado 20 de septiembre, días antes de que se produjera el cese del responsable de personal del almacén compostelano y del jefe de personal de Galicia.
La sentencia acredita que la extrabajadora fue acosada por un jefe de planta, J.M.C.D., despedido en febrero de 2017 una vez que la Comisión Instructora para el Tratamiento e Investigación de Situaciones de Acoso (CITSA) de la compañía, donde la víctima presentó una denuncia, concluyó que existía el acoso sexual. El informe del CITSA señala que el exjefe de planta de Santiago dirigió a la denunciante y a otras trabajadoras "insinuaciones y comentarios molestos, humillantes y de contenido sexual; comentarios obscenos, proposiciones de carácter sexual directas e indirectas, tocamientos, gestos obscenos y roces innecesarios".
Respecto a los miembros de la dirección conocedores de los hechos, la jueza indica que se produjo un "incumplimiento empresarial en la medida que no ha dado a la trabajadora demandante una protección eficazen materia de seguridad y salud en el trabajo que garantizarse su integridad". Llega a esta conclusión debido a que el jefe de planta fue ascendido a ese puesto a pesar de las quejas de la trabajadora acosada, lo que "lejos de una reprobación de su conducta, más bien refleja una buena consideración de su forma de trabajo".E insiste la sentencia: "La inactividad por parte de la dirección empresarial resulta especialmente llamativa teniendo en cuenta que tal como se desprende del informe de conclusiones CITSA, las conductas inapropiadas de carácter sexual por parte del J.M.C.D. se extendían a más trabajadoras y era vox populi que le gustaba tontear con las mujeres".