La “incertidumbre” marca las previsiones económicas y las provincias de Castilla y León podrían haber cerrado el año pasado con mermas de entre el 9,2 y el 12,5 por ciento, mientras que para 2021 podrían crecer desde un 2,7 a un ocho por ciento, según un escenario base y otro menos favorable elaborado por Unicaja Banco.
Burgos sería la provincia con un mayor impacto de la crisis en 2020, con una pérdida de entre el 12 y el 12,5 por ciento de su producción; y Ávila, la que menos, con retrocesos entre el 9,2 y 9,6 por ciento. Asimismo, Soria lideraría la recuperación en 2021, y podría crecer entre un 5,7 y un ocho por ciento; mientras que la menos dinámica en los dos escenarios sería Palencia, con avances entre el 2,7 y el 5,5 por ciento.
Unicaja Banco publicó en las últimas horas el número 4 de su informe trimestral ‘Situación económica y perspectivas de las provincias de Castilla y León’, elaborado por Analistas Económicos de Andalucía, sociedad de estudios del Grupo Unicaja Banco, que revela “un fuerte retroceso del Producto Interior Bruto (PIB) de las provincias castellanas y leonesas para 2020 y a un crecimiento generalizado para 2021”. Analistas Económicos de Andalucía advierten no obstante que “la incertidumbre continúa siendo muy elevada y condiciona enormemente las proyecciones de crecimiento”.
El informe ofrece una horquilla en sus estimaciones en un escenario más y menos favorable. Todas las provincias de Castilla y León sufrirán un retroceso de su economía en 2020 por encima del nueve por ciento mientras que este año recuperarán la senda del crecimiento, con valores en todos los territorios por encima del 5,5 por ciento, dentro de un escenario base que podría empeorar. En este sentido, con una evolución menos favorable de la economía, la recesión en 2020 se situaría por encima del 9,6 por ciento en todos los territorios, y el crecimiento en 2021, empezaría desde un 2,7 por ciento.
En concreto, para el año 2020, las previsiones de cierre en un escenario base indican que la economía zamorana sería la tercera que más sufrió la crisis con un retroceso del 10,6 por ciento, solo por detrás de Burgos y Palencia, con 12% y 11,9% respectivamente. En un escenario menos favorable, la estimación de pérdida de producción en 2020 en Zamora se sitúa en el 11 por ciento.
En cuanto a la previsión para el ejercicio que comienza, el escenario base sitúa a la cabeza del crecimiento de la Comunidad. La provincia de Zamora será la segunda con menor crecimiento, con un 5,8 por ciento, solo por delante de Palencia, a quien se le atribuye un crecimiento del 5,5 por ciento. Un escenario con un comportamiento menos favorable de la economía recortaría esas previsiones hasta un avance escaso del 3,1 por ciento en la provincia de Zamora.