Labor impagable, y en muchas ocasiones, muy dura, es la que realizan los voluntarios de la AECC ofreciendo un halo de esperanza o el apoyo que hace falta cuando esta parece haberse desvanecido a los pacientes oncológicos y sus familias. Este jueves se conmemora el Día Mundial del Voluntariado y es por ello por lo que la AECC de Zamora ha diseñado la campaña 'En sus zapatos', con los testimonios de varios miembros de la asociación que relatan en primera persona cómo realizan su misión para que toda la sociedad pueda, efectivamente, 'ponerse en sus zapatos' y entender que un voluntariado engloba mucho más que ponerse el chaleco verde.
"Hay aproximadamente 400 voluntarios, pero siempre hay sitio para quien quiera ayudar", explicaba Marina Pinilla, coordinadora de voluntariado, y añadía que "sí que requiere compromiso porque hay personas que tienen que ir a tratamiento todas las semanas y no tienen a nadie que los acompañe".
El presidente de la AECC Zamora, Alfonso Fernández, insistía en que los voluntarios son "el alma de la asociación". "La Asociación no existiría si no hubiera unos voluntarios detrás que la soportan", añadían.
Por su parte, el delegado territorial de la Junta, Fernando Prada, apuntaba que "cuando un paciente recibe la trágica noticia de que tiene un cáncer, ahí están los voluntarios dándoles algo tan sencillo como es la esperanza, pero también le va a aconsejar y le va a guiar por el camino que tiene que recorrer, siempre con el objetivo de luchar contra la enfermedad".
Mari Paz, una de las protagonistas cuyos zapatos se encuentran como muestra en la exposición, señalaba que "hay veces que me voy yo más llena que lo que pienso que doy yo". "Soy voluntaria de hospital y hago todas las campañas y todo en lo que pueda participar y ayudar", aseguraba. "Siempre estamos aprendiendo, y esa satisfacción de poder ayudar a la gente aunque sea escuchando, es muy importante", aseguraba.