Todavía con los resquicios de la borrasca Filomena en Zamoracapital, la ciudad ha vuelto a amanecer blanca este jueves, pero esta vez no hasido a causa de la nieve, sino que la cencellada ha regresado para teñir laciudad con un manto blanco.
La cencellada se produce con la combinación de la humedad yla niebla con temperaturas por debajo de cero grados, dejando imágenes deextrema belleza, pero también genera gran peligro puesto que congela las callesque forman una película de hielo y puede dar lugar a incidentes.
Han sido muchos los que han decidido fotografiar lacencellada y disfrutarla desafiando al frío que ha invadido las calles de laciudad.