El claustro del Seminario San Atilano volvía a brillar ayer, dos años después, con la única luz tenue de las velas en una cita que se ha convertido en todo un referente para los amantes de la música clásica.
La Noche de las Velas ha celebrado su octava edición con un recital que ha contado con la soprano Cecilia Lavilla Berganza y el barítono Luis Santana como protagonistas acompañados de Víctor Carbajo al piano y en la que además se ha estrenado la “Oda a la Esperanza” de David Rivas Domínguez y letra de Daniel Pérez Fernández y “ El triunfo de la vida” de Pablo Toribio Gil y letra de Luis Felipe Delgado De Castro.
De nuevo una jornada exitosa que ha cobrado doble sentido y que ha contado con la presencia del obispo de Zamora, Fernando Valera. La música y las voces han embelesado al público, pero también han aflorado decenas de sensaciones ante la situación sanitaria actual, con una pandemia que por fin comienza a remitir pero en la que todavía queda mucho por caminar y por ello la noche también se convirtió en un homenaje para aquellos que por el camino perdieron la vida a causa del Covid.