La pasada semana las consejeras de Hacienda y Cultura y Turismo, Pilar del Olmo y Alicia García, presentaron junto al presidente del Consejo Consultivo, Mario Amilivia, el Proyecto cultural arqueológico 'En busca del tiempo perdido: Arqueología e historia en la ciudad de Zamora', que consiste en la exposición de una selección de los restos hallados en el solar de la sede de la institución autonómica situado en la plaza de la Catedral zamorana. Unión Progreso y Democracia, valora muy positivamente que "en su día y antes de la construcción del edificio se promoviera una excavación arqueológica tan completa y exhaustiva en una zona de suma importancia para conocer la historia de la ciudad".
No obstante, UPyD quiere recordar su frontal oposición desde su fundación como partido a "la existencia de este tipo de órganos superfluos". Una oposición que para UPyD en Zamora, y en el caso de la institución regional situada en la capital, se extendió a la elección por parte de la Junta de Castilla y León de ese concreto solar para su construcción. El candidato a la alcaldía, José Miguel Mateos, se lamenta de que “la millonaria inversión habría sido infinitamente más ventajosa para la ciudad si la Junta hubiera levantado en ese solar el Museo de la Semana Santa que la Pasión zamorana se merece”.
Para la formación magenta resulta "patético" el afán por dotar de contenidos a un gigantesco mausoleo - "algo que el edificio no lo deja de ser por mucho que éste tenga un reconocido diseño arquitectónico" - de un órgano "a todas luces innecesario para atender a las necesidades de los ciudadanos". En concreto y sobre esta última exposición, UPyD en Zamora reclama que los fondos previstos para ese proyecto se destinen directamente al estudio de los restos hallados y auna mejora del espacio expositivo del Museo de Zamora que es donde al final terminarán depositados y, si así fuera decido a la vez que posible, expuestos.
Mateos terminó diciendo que “los zamoranos ya están hartos de ver en el Consultivo la exposición no de restos pétreos, sino de los rostros pétreos de políticos y afines, restos arqueológicos de partidos ya muy viejos. En vez de dedicarse a buscar el tiempo perdido, mejor que se vayan a su casa y nos ahorramos el dinero. Esto sale muy caro y hoy tenemos auténticas necesidades en las que mejor emplear el dinero público".