El 2 de julio acaba el plazo para presentar la declaración de IRPF, tanto si te toca pagar, como si te devuelve Hacienda. Y si te sale a pagar y quieres domiciliar el pago, tienes aún menos tiempo.
Si tu declaración es a devolver, puedes presentar la declaración a través de la plataforma Renta Web. Si no necesitas realizar modificaciones, también podrás hacerlo a través de la aplicación móvil de la AEAT. La aplicación no permite añadir ni modificar datos de la declaración por lo que, si tienes que hacer cambios, deberás hacerlos a través de RentaWeb. Recuerda que para acceder necesitarás el número de referencia. También podrá acceder con tu Cl@vePIN, o con certificado electrónico: lee aquí cómo presentar tu declaración por internet.
Si el resultado es a ingresar y quieres domiciliar el pago en tu cuenta, tienes solo hasta el 27 de junio para hacerlo: date prisa. En RentaWeb aparecerá como opción de pago por defecto el fraccionamiento del pago en dos plazos con la domiciliación de ambos. Si no quieres fraccionar, el banco cargará el 2 de julio el importe total en tu cuenta y si has decidido fraccionar el pago, el primer plazo, que es el 60% del importe a pagar. Asegúrate de tener suficiente saldo para ese día. El segundo plazo, por el 40% restante, se cargará en tu cuenta el 5 de noviembre de 2018.
Si se te ha pasado el plazo para domiciliar el pago, todavía tienes hasta el 2 de julio para presentar la declaración, pero deberás realizar el pago como paso previo a la presentación de la declaración y obtener el NRC (Número de Referencia Completo) necesario para poder presentarla. Si tienes certificado electrónico o Cl@ve PIN, el pago y la obtención del NRC puede hacerse directamente desde RentaWeb. Deberás seleccionar “pago en cuenta” o “pago con tarjeta” y seguir los pasos que te indican. Si usas el número de referencia, primero deberás realizar el pago en tu banco para obtener el NRC y proceder después a la presentación, incluyendo ese número de referencia en RentaWeb.
Presentar la declaración de la Renta fuera del plazo te saldrá caro. En las declaraciones a ingresar, si te pasas del plazo pagarás un recargo que será del 5% del importe a ingresar si lo haces dentro de los tres primeros meses tras el fin del plazo y no hay requerimiento previo por parte de Hacienda. Presentar la declaración a devolver fuera de plazo (sin requerimiento previo) implica también una sanción: 100 euros, que se reducen a 75 euros si no recurres y pagas en periodo voluntario.
Últimos días para presentar la declaración de la renta
Se acaba el tiempo: el 2 de julio es el último día para presentar tu declaración de IRPF, salvo si te toca pagar y quieres domiciliar el pago, la opción más cómoda, pues en ese caso el plazo acaba el 27 de junio. Si aún no lo has hecho, no te descuides: incumplir el plazo puede salir caro.
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