Tras la sexta reunión mantenida en las últimas horas entre la Junta de Castilla y León y los representantes sindicales UGT, CCOO y CSIF, la Junta de Castilla y León ha cumplido el compromiso de establecer las bases de un acuerdo para la aplicación de la jornada ordinaria de 35 horas, consistente en su entrada en funcionamiento el próximo 31 de marzo de 2020 y derivando la concreción de los términos precisos de la aplicación por sectores a Mesas Técnicas que se constituyeran a tal fin.
Con esa propuesta de acuerdo, la Junta ha vuelto a ofrecer nuevas muestras de flexibilidad en su posición, lo cual ha supuesto un nuevo acercamiento de la Administración que en anteriores momentos había puesto sobre la mesa inicialmente la fecha del 1 de diciembre de 2020 y posteriormente la de 1 de junio de 2020.
Esta fecha propuesta por escrito se hace como límite al cumplimiento de los requisitos que marcan el modo de actuar de la Junta en este tema: garantía de cobertura presupuestaria de la medida, compromiso de adecuada organización, actividad y calidad de los servicios públicos y equidad en la aplicación para todos los sectores. Asimismo, aseguraba la sostenibilidad en el tiempo de la aplicación de la medida.
Por último, habiendo llegado al acuerdo del cumplimiento del compromiso inequívoco firmado para la implantación de las 35 horas y sobre cómo efectuar su aplicación práctica, la Junta lamenta que el único escollo que no se haya podido salvar sea el de la fecha efectiva de aplicación, a pesar de todos los esfuerzos realizados, manifestando su pesar por la inamovilidad de la fecha planteada por las Organizaciones Sindicales. No obstante la Junta, manteniendo su compromiso, seguirá trabajando en su tramitación, aunque ya sin un escenario cierto para su implantación en cuanto a la forma y la fecha de la misma.
Los sindicatos reiteran el 1 de enero como fecha límite y este miércoles acuden a la huelga.