La Federación Estatal de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT reclama a la Junta de Castilla y León “un cambio de criterio del rastreo de los contactos estrechos en el ámbito educativo para contribuir a una contención real de la pandemia”. Según apuntan desde el sindicato, resulta “incomprensible” que la norma estatal exija dos metros de distancia y el Gobierno regional relaje el concepto de contacto estrecho hasta el metro y medio en todos los sectores involucrados en la educación de la Comunidad”.
Es por ello que el Procurador del Común, tras una denuncia formalizada por UGT, insta a la Consejería de Educación a modificar el concepto de “contacto estrecho en el ámbito educativo” y le solicita que lo redacte de acuerdo a la Guía de ‘Actuación de centros educativos’ elaborada por el Ministerio de Sanidad.
Según el sindicato, existe una “evidente falta de concordancia en la definición de contacto estrecho” en la Instrucción publicada por la Consejería de Educación con respecto a la definición que establece el Ministerio de Sanidad en la guía citada.
En este mismo sentido, UGT advierte a la Consejería de que “la Administración autonómica debe llevar a cabo una prevención de las situaciones de riesgo que pudieran materializarse en daños y perjuicios para los ciudadanos como consecuencia de la gestión administrativa, especialmente en aquellos sectores en los que el riesgo pueda ser mayor”.
En un comunicado, insisten en que la resolución estatal es clara y determina que, en el ámbito educativo, alumnos y docentes deben mantener una distancia de, al menos, 2 metros de separación. En caso contrario, el Ministerio de Sanidad considera que existe un contacto estrecho.
Al rebajar esa distancia a metro y medio en la autonomía, se reduce el número de actuaciones en los centros sostenidos con fondos públicos para la realización de pruebas de detección PCR y seguimiento de casos posibles de COVID-19. Desde el sindicato confían en que la Consejería acepte la resolución del Procurador” y modifiquen la “polémica instrucción”.