El sindicato ha subrayado que los datos de paro y afiliación de junio corroboran el cambio de tendencia apuntado el pasado mes de mayo y los ha atribuido al proceso de desescalada y de reapertura económica, al freno en el flujo de personas hacia el desempleo y al menor volumen de trabajadores en ERTE.
La organización que dirige Pepe Álvarez ha pedido al Gobierno que vigile y tome medidas para evitar que la recuperación se fundamente en la precariedad y el subempleo, y negocie con los agentes sociales un plan de choque por el empleo de calidad para una reconstrucción social justa.
Para UGT, en un escenario de nueva normalidad será imprescindible alterar las condiciones para que los contratos precarios -temporales y a tiempo parcial-, no se conviertan en el mecanismo de creación de subempleo que utilicen las empresas en el periodo de recuperación de la crisis.