La patronal autonómica Fetracal muestra su rechazo a las medidas impuestas por varias comunidades autónomas, entre ellas la de Castilla y León, para desviar el tráfico de camiones por autopistas con el consiguiente cobro de peaje.
Sin embargo, los transportistas de mercancías no están en contra del desvío de algunos tramos de carreteras nacionales a autopistas, siempre que el mismo sea debidamente bonificado. De momento, la Junta y el Ministerio han acordado rebajas del 75 por ciento en los peajes de la AP-1 y AP-71 entre Burgos y Miranda de Ebro y entre León y Astorga.
Rechazan que estas medidas tengan un carácter obligatorio, y proponen que, como mínimo, se permita a los camioneros abandonar la autopista para el aprovisionamiento de los vehículos y de los conductores.
Como forma de protesta, Fetracal respalda la huelga que durará toda esta semana en las carreteras de Guipúzcoa en protesta por los peajes para vehículos pesados que la Diputación guipuzcoana empezará a cobrar en las carreteras N-1 y A-15 a su paso por esta provincia.
Aseguran que estas medidas van en contra del sector del transporte de mercancías por carretera y perjudican a la mayoría de los profesionales, tanto autónomos y empresarios, de Castilla y León y que “en ningún momento se han sentido respaldados”.