José Carlos Calzada, concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Zamora, informaba este martes después de la Junta de Gobierno Local del Consistorio que la próxima Comisión de Hacienda debatirá dos modificaciones en ordenanzas. La primera de ellas relativa a la tasa de recogida de residuos. Se trata de modificaciones meramente técnicas que servirán “para añadir que las bonificaciones a que tienen derecho ciudadanos que estén dentro de las contempladas en la ordenanza se puedan solicitar a lo largo de todo el ejercicio y para que tengan efectos en el ejercicio siguiente”, exponía Calzada.
La segunda modificación que se presentará en comisión antes de ser llevada a Pleno es la relativa a la bajada del impuesto de bienes inmuebles. Se trata de una medida que iba en el pacto de gobierno de PSOE e IU y que posteriormente también se unieron Ciudadanos y edil no adscrita a principios de este año. “El pacto era de bajar el tipo impositivo al 0,48. La propuesta que va a la comisión es la de bajar el tipo impositivo del IBI al 0,477”, comentaba Calzada.
Hay que apuntar que esa tasa era del 0,501 en 2018. “Va a ser este tipo impositivo para las tres categorías: inmuebles, rústicos y de categoría especial. Esto hace que en capitales de Castilla y León para especial y rústica sea el más bajo y solo una tiene un poco más bajo el de urbano”, comentaba el edil del ramo, que recordaba que “desde que este equipo de gobierno ha tomado las riendas de Ayuntamiento el tipo impositivo ha bajado del 0,57 al 0,47 de esa base líquida sobre el que se aplica”.
A efectos prácticos, esta bajada quiere decir que aquellos que tengan una base liquidable de 70.000 euros (que es lo que puede tener una familia normal en Zamora) se ahorrarán en el recibo más de 17 euros. “Entre lo que baja el tipo impositivo y no sube, además de la retirada de aquella tasa de basura camuflada en el IBI que había hace unos años, podemos decir que hablamos de un impacto de 900.000 euros que el Ayuntamiento dejará de ingresar”, comentaba Calzada, que aseguraba que se trata de una bajada que está estudiada con los técnicos y que es asumible.
“Lo que no puede ser es lo que pretende el PP, que es que los servicios y la inversión suban y que los impuestos bajen todavía más. Con esa forma de gestión solo iríamos a un nuevo escenario de Ayuntamiento con deudas como estaba antes de entrar este equipo de Gobierno”, zanjaba el concejal de Hacienda, que confirmaba que estos cambios de ordenanza tienen que estar listos antes del 1 de enero de 2019.