"Bien está lo que bien acaba" así calificó el alcalde Francisco Guarido la conclusión del primer Pleno Extraordinario del año en el Consistorio. Una frase ya utilizada tras el acuerdo alcanzado entre el equipo de Gobierno con ciudadanos y la no adscrita Cruz Lucas que este lunes se ha materializado en luz verde para los presupuestos de 2018. Este acuerdo, ya en su día, levantó ampollas entre los populares que así lo han demostrado en este Pleno tras denunciar su "aislamiento" en el acuerdo previo al nuevo Pleno que ha estado cargado de reproches.
Recriminaciones de los Populares al grupo Ciudadanos por "venderse" al equipo de Gobierno "desaprovechando la oportunidad de conseguir unos mejores presupuestos". Sensaciones del grupo popular en palabras de San Damián negadas por el propio Requejo y el equipo de Gobierno que han negado tales acusaciones calificando esta actuación de "negociación en beneficio de la economía municipal". Y es que, el "aislamiento" de los Populares se ha vuelto a poner de manifiesto con la negativa del resto de grupos a las doce enmiendas presupuestarias presentadas.
Ante la aprobación de las cuentas municipales de cara a 2018, Guarido ha señalado que "en ningún momento se ha aislado al PP, puesto que nunca mostraron su intención escrita de sentarse a negociar". Es por ello que se han aprobado con los votos en contra de los populares "que se aceptan de buen grado y es normal la existencia de oposición", sentenció Guarido al tiempo que el concejal de IU, Miguel Ángel Viñas desacreditó sus críticas resaltando que "sus cambios propuestos a través de los medios de comunicación suponían un 2 % del total presupuestado".
Y es que, San Damián ha solicitado, en repetidas ocasiones, "menos discursos y más recursos puesto que este proyecto demuestra la ineficacia de gestionar la ciudad demostrando que son malos estudiantes con asignaturas pendientes". Declaraciones respondidas por parte de Viñas asegurando que sí es un mal estudiante "y es por ello que se aprende a sacar las cosas con esfuerzo y no a dedo".
De esta forma, tanto Guarido como Viñas instaron al Partido Popular a que "si de verdad quieren ver mejoría en la ciudad" su partido se encuentra en puestos de poder para "poder solucionar la situación actual y que de esta forma se vea revertido en la provincia".
Se cierra así el capítulo de Presupuestos dentro del Ayuntamiento. Un capítulo del libro de 2018 que comenzó con un prólogo de negativa que a través de la historia se ha convertido en "tripartito" para los Populares, "en sana oposición" para Ciudadanos y no adscritos y en "satisfactorio" para los firmantes del libro, el equipo de Gobierno. El resto del libro quedará por escribirse durante todo este 2018 y el próximo 2019 con las partidas que entrarán en juego el próximo año.
Como resumen de esta narrativa municipal, el Presupuesto aprobado ha sido 57.361.837,20 euros, de los cuales 4,5 millones se destinarán directamente a inversiones, a los que habrá que sumar las inversiones sostenibles con cargo a la liquidación del ejercicio actual,, lo que previsiblemente duplicará al menos esa cifra, y 4.750.000 euros se destinarán a gastos sociales. La mayor cuantía del gasto corresponderá al mantenimiento de bienes corrientes y servicios, con 27.986.000 euros destinados a este fin, seguido de los gastos de personal que ascienden a 20.827.000 euros.
El acuerdo incluye además otros compromisos políticos como la modificación de la Ordenanza del IBI para la rebaja del tipo impositivo de cara a 2019, la dotación de personal técnico en la Oficina de Turismo y la solicitud de la capitalidad nacional de Gastronomía para 2019, el impulso del Plan de Mantenimiento o la sustitución de alumbrado con cargo a las inversiones sostenibles y parte del pavimento de San Torcuato; por lo que la valoración económica del acuerdo en su conjunto se cifra en 1.230.000 euros.
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