Una Navidad más, las residencias de mayores de Zamora volverán a ser destinatarias de la solidaridad y el talento de los zamoranos, que ofrecerán sus mejores deseos para los usuarios de estos servicios a través de sus productos fabricados artesanalmente. "Teje por ellos" repite por segundo año consecutivo, a fin de superar las cifras de productos recolectados el año pasado para que el máximo número de mayores posible reciba alguno de estos regalos en fechas tan señaladas.
Calcetines, bufandas, gorros, monederos, bolsos o cuadros son solo algunos de los productos que esta iniciativa recoge para regalárselas a los mayores y que perciban un poco del cariño que todavía les profesa la sociedad. Conscientes del aislamiento que durante la pandemia tuvieron que sufrir por el riesgo que corrían, recibirán con ilusión estos regalos.
Arancha Arribas, creadora de la iniciativa explica que "me parecía muy bonito unir el ganchillo que tradicionalmente nos enseñan a hacer las abuelas para poder recoger artículos tejidos que nos mandara la gente para poder hacer un regalo a las personas internas en residencias". Es el segundo año consecutivo que se lleva a cabo este solidario proyecto. "El año pasado funcionó muy bien, recogimos 290 donaciones de artículos", comenta Arribas.
Estuches, bufandas, broches, pulseras, monederos o collares son solo algunos de los elementos que "Teje por ellos" hizo llegar a unos emocionados usuarios de las residencias. "Pude llevárselos personalmente y fue un momento muy emotivo", apuntaba Arribas. "La gente que recibía los regalos te contaba que ellos también tejían, o que habían visto a su madre tejer y era un momento muy bonito", añadía.
"Teje por ellos" no ha dejado de crecer desde el momento de su creación. Si bien ya el año pasado Arancha Arribas se vio sorprendida por el volumen de donaciones recibidas, este año ha habilitado cuatro puntos de recogida en Zamora capital y hará lo propio en otras localidades como Toro y Benavente. Además, en esta segunda edición se ha ampliado la oferta "a todo lo que sea hilo y aguja". Explica Arancha que "el año pasado hubo gente que no pudo donar porque no hace ganchillo o punto, por eso ahora aceptamos también macramé, bordados, punto de cruz o fieltro".
La creadora de esta iniciativa ha manifestado sentirse "muy contenta, pero también abrumada" por la cantidad de donaciones y la difusión que tiene un proyecto con una finalidad tan noble y encomiable como hacer felices a personas internas en residencias en fechas tan señaladas. "Incluso tenemos otro punto de recogida en Galicia, de una diseñadora de crochet que se ha puesto en contacto con nosotros para colaborar", celebraba Arancha Arribas, que ya tiene todo preparado para recibir el máximo número de donaciones posibles para llegar al mayor número de gente posible.