La CentralSindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativoen las administraciones públicas, advierte de que los cambios aprobados por elGobierno para agilizar la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV) “llegan tardey caerán en saco roto si no hay un refuerzo urgente del personal de laSeguridad Social”.
En lospróximos días, CSIF -junto a CCOO y UGT- mantendrá una reunión con elsecretario de Estado de Seguridad Social, Israel Arroyo, para abordar lasituación de colapso y los retrasos en la gestión de prestaciones en esteorganismo.
Además, desdeCSIF temen que el colapso actual se extienda también a la Tesorería de laSeguridad Social, que a partir de ahora se encargará también de reclamar lospagos indebidos de esta prestación con la dificultad que todo ello conlleva.
Desde CSIFinsisten en que la capacidad de gestión del Sistema de Seguridad Social siguedesbordada por la demanda de la ciudadanía tras la incorporación de nuevasresponsabilidades, como la tramitación del IMV. Se trata de un problemaestructural, ya que las plantillas se han reducido un 21 por ciento desde 2010por las políticas de recorte -hasta situarse en 23.900 personas- y urge unrefuerzo de personal de más de 6.000 trabajadores/as.
“El volumen detrabajo es tan grande que el sistema sigue saturado y las plantillas no danabasto, sobre todo, si se tiene en cuenta que se tardan unos 50 minutos en larevisión de un expediente siempre que toda la documentación esté correcta, queno suele ser lo habitual”, resaltan.
“Estasituación se añade a los retrasos que se estaban sufriendo desde comienzos deaño y que se ven agravados ahora en casos como en el del reconocimiento de laspensiones de jubilación, que han pasado de tramitarse de un plazo de quincedías a más de un mes. Y las citas, hoy por hoy, son imposibles de conseguir enmás de la mitad del territorio nacional”, concluyen.