Este sábado se conocía que el servicio público de sanidad de Castilla y León (SACYL) suspendería desde lunes el servicio de ambulancias para trasladar a los ancianos de las residencias a consultas médicas. Así lo desvelaba la periodista Laura Cornejo en elDiario.es, que explicaba que hay una excepción: los pacientes oncológicos. Según este medio, Sanidad argumenta como motivo la crisis provocada por la COVID-19.
La alcaldesa de la localidad zamorana de San Vitero, Vanesa Mezquita, lamentaba esta decisión y exponía: “Esto es una lucha constante y un desmantelamiento en toda regla”, haciendo referencia a la Sanidad de la comunidad y a este artículo publicado en elDiario.es.
No obstante, la propia primera edil del Consistorio de San Vitero se ponía en contacto con Sanidad durante este mismo sábado, y tras conocer la respuesta rectificaba: “Según me han explicado, fue una decisión que tomó unilateralmente la empresa de ambulancias y el pasado día 11 ya se mandó una instrucción para revertirlo”, desvela Mezquita.
En esa instrucción se puede leer lo siguiente:
INSTRUCCIÓN DE 11 DE NOVIEMBRE DE 2020 SOBRE MOVILIZACIÓN DE RECURSOS DE TRANSPORTE SANITARIO EN RESPUESTA A LA INFECCIÓN COVID-19.
Desde la Dirección General de Planificación y Asistencia Sanitaria se adopta la siguiente medida que tendrá la vigencia que las circunstancias cambiantes y la evolución de la situación de alerta requieran:
El Transporte Sanitario Terrestre No urgente programado que ineludiblemente necesite atención sanitaria se canalizará a través del responsable, o persona en quien delegue, designado en cada provincia de acuerdo con la relación contenida en el Anexo que se adjunta y serán a estos efectos los interlocutores únicos con la empresa de transporte sanitario.
Cualquier modificación de esta instrucción deberá ser comunicada por los responsables de cada punto al Servicio de Actividad Concertada (DGPAS).