Ante el incremento vertiginoso de la incidencia acumulada (I.A.) a siete días, cinco veces superior a la incidencia de la semana de Navidad, se ha decidido reforzar la campaña de vacunación si está garantizado el suministro; continuar con los cribados masivos; y extender a todas las provincias las actuales restricciones adicionales vigentes en Ávila, Palencia y Segovia.
En este contexto, la vacuna, además de un hito científico histórico, se vislumbra como el camino para superar el reto pandémico y, en ese sentido, la Comunidad de Castilla y León está inmersa en el desarrollo de su Estrategia de vacunación frente a la COVID-19, la cual se está llevando a cabo de acuerdo con lo establecido para el conjunto del Sistema Nacional de Salud.
De esta manera, desde que se comenzase a vacunar el pasado 27 de diciembre, la Comunidad está administrando la pauta vacunal frente al nuevo coronavirus SARS-CoV-2 al primero de los grupos prioritarios indicados por el Consejo Interterritorial: el compuesto por personas residentes en centros de atención a la Tercera Edad y a la Dependencia.
La vacunación de este grupo población de especial riesgo avanza a un ritmo muy destacable y, según el registro de vacunaciones de Castilla y León, a fecha 11 de enero, ya se había vacunado con la primera de las dos dosis necesarias 36.229 personas (Ávila, 2.439; Burgos, 5.602; León, 6.087; Palencia, 3.711; Salamanca, 5.453; Segovia, 1.206; Soria, 2.253; Valladolid 6.563; y Zamora, 2.915)
Hoy, de acuerdo con la planificación prevista por el Ministerio de Sanidad, se ha llegado un nuevo envío semanal de la vacuna de Pfizer-BioNTech, por ahora la única disponible, consistente en otras 25.350 dosis, si bien, por problemas logísticos relacionados con el temporal de nieve, las provincias de Ávila y Segovia recibirán sus remesas vacunales mañana.
La llegada de este tercer envío ministerial -cuyo reparto en cada una de las provincias castellanas y leonesas es el siguiente: Ávila, 1.950 dosis; Burgos, 4.875; León, 3.900; Palencia, 2.950; Salamanca, 2.950; Segovia, 975; Soria, 975; Valladolid, 4.875; y Zamora, 1.950- va permitir a la comunidad mantener el buen ritmo de vacunación entre los integrantes del primer grupo prioritario, de manera que en breves fechas se podrá comenzar a administrarles la segunda de las dosis, una vez cumplidas las tres semanas previstas entre una y otra inoculación.
El avance de la Estrategia de vacunación frente a la COVID-19 en Castilla y León en este segmento socialmente vulnerable a la enfermedad es paso inmediato para comenzar a vacunar al segundo de los grupos definidos en el Sistema Nacional de Salud, el de los profesionales sanitarios, especialmente los de primera línea asistencial.
Por otra parte, la Junta está reforzando la detección precoz de contagios por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, con el fin de diagnosticar personas asintomáticas o con sintomatología leve que puedan constituirse como focos de transmisión de la enfermedad y origen de brotes de amplia extensión.
Con el fin de lograr la mayor detección precoz posible, más en un contexto de tercera onda pandémica vinculada a las recientes celebraciones navideñas, la Autoridad sanitaria autonómica desarrolla en zonas básicas de salud y municipios en los que se presentan elevados indicadores de contagios e incidencia acumulada, test de antígenos de segunda generación.