La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha presentado hoy en las Cortes de Castilla y León el Proyecto de Presupuestos de su departamento para 2021, que con un total de 4.366 millones de euros se convierte en el mayor dedicado al sistema público de salud en la historia de la Comunidad. Esta cifra representa un incremento respecto a los presupuestos anteriores de un 21,68 % (más de 777 millones de euros de diferencia).
Gracias a este esfuerzo, se va a destinar en torno a un 7,58 % del PIB regional a la Sanidad de Castilla y León, cumpliendo así tanto con el objetivo marcado al inicio de la legislatura como con el 'Pacto para la recuperación económica, el empleo y la cohesión social' firmado en el Parlamento autonómico.
Para la consejera, esta decisión de dotar adecuadamente al sistema sanitario ha sido posible, entre otros factores, gracias al compromiso con la salud del resto de consejerías, de manera que “por primera vez en la historia podemos decir que la Sanidad pública de Castilla y León posee los presupuestos que se merece, y ello a pesar de que no exista un nuevo sistema de financiación autonómica que tenga en cuenta las características especiales de nuestra Comunidad”.
En su intervención, la titular de Sanidad ha recordado en primer lugar que “somos conscientes de las necesidades y del modelo que se precisa para que los ciudadanos de Castilla y León sigan teniendo uno de los mejores sistemas sanitarios de España. A las debilidades y amenazas ya conocidas se ha unido este año la pandemia de la COVID-19, y a todo ello han de sumarse tres problemas crónicos en el conjunto del país: falta de planificación, falta de relevancia de la formación y falta de financiación, ya que el modelo actual es deficitario para esta Comunidad al no llegar a cubrir el denominado gasto social“.
“Es precisa -ha señalado- una herramienta que permita sentar las bases de medidas estructurales que, en el medio plazo, nos permita enfrentar las debilidades y amenazas que atenazan nuestro sistema sanitario, sentando líneas de trabajo que sobrepasen lo urgente y no se desvíen por las necesidades diarias. Esa herramienta, que debe garantizar un modelo sanitario público, universal y gratuito, es este presupuesto”.
Esta inversión de 4.366 millones recoge cuatro principios básicos que se resumen así:
- -Son unos presupuestos realistas, ya que por primera vez la cantidad asignada va a permitir cubrir el gasto real del Servicio Público de Salud de Castilla y León, garantizando la sostenibilidad económica del sistema.
- -Permiten sentar los cimientos de las reformas que garanticen la eficacia, eficiencia, seguridad y calidad del sistema sanitario en el medio y largo plazo.
- -Permiten consolidar los recursos suficientes para garantizar las retribuciones del personal, mejorar infraestructuras, renovar y adquirir equipos de alta tecnología y carteras de servicios asistenciales de calidad.
- -Cumplen con los objetivos marcados para el área sanitaria en el 'Pacto para la recuperación económica, el empleo y la cohesión social', dotándose un fondo de 250 millones de euros para paliar los efectos del coronavirus e incrementando los recursos destinados a la sanidad para llegar a ese 7,58 % del PIB.
Verónica Casado ha destacado, además, que este presupuesto es también una apuesta por el reconocimiento de la calidad del sistema sanitario de Castilla y León a nivel nacional. Así, si el gasto sanitario por tarjeta en España en el año 2018 era de 1.523 euros, la Comunidad destinaba una cuantía similar. Con este presupuesto se pasa a consignar 1.882 euros por tarjeta sanitaria, lo que supone situarse a la cabeza del país en inversión sanitaria por habitante, con un aumento de más del 23 %.
Gasto por capítulos
Entrando en materia, a nivel general a la Consejería de Sanidad le corresponde un presupuesto de 108,48 millones (16,58 % de aumento), mientras que a la Gerencia Regional de Salud le han sido asignados 4.257,59 millones de euros (21,82 % más).
Por capítulos, el referido a gastos de personal (Capítulo I) supone un 49,4 % del total y pretende “romper la tendencia histórica de esta Comunidad en limitar la inversión en los profesionales de la sanidad”, con una partida de 2.155 millones, 318,48 más que el anterior (17,33 % de aumento).
“Con este aumento presupuestario -ha explicado la consejera-, vamos a trabajar para mejorar la estabilidad laboral de nuestros profesionales, vamos a mejorar las retribuciones [VCV1] de algunas categorías, vamos a cubrir las vacantes de nuestros servicios territoriales, especialmente en Salud Pública, y vamos a desarrollar y a incentivar la carrera profesional de nuestros profesionales, así como mejorar el sistema de docencia y formación”.
En este capítulo cabe destacar el aumento de un 9,4 % de la partida destinada a la Consejería de Sanidad, dedicándose a la Secretaría General 15,22 millones, un 23,9 % más, y un aumento de 4 millones para reforzar el personal de Salud Pública, alcanzando una cuantía de 59 millones. En la Gerencia Regional de Salud, la partida para Atención Primaria aumenta un 19,2 % hasta alcanzar los 613,92 millones; en Atención Hospitalaria sube un 16,7 % hasta los 1.344,4 millones; y en emergencias crece un 66,9 % (22,4 millones).
Destaca el incremento en el programa destinado a la formación de internos residentes, que asciende a 75,68 millones de euros, lo que supone un aumento del 26,8% respecto al anterior presupuesto. “Queremos ponerles -ha dicho la consejera- en el lugar que corresponde, y queremos que Castilla y León sea un lugar atractivo para que los profesionales que formamos se queden y los que se forman fuera decidan venir a nuestra Comunidad a ejercer su profesión”.
El Capítulo II de gastos corrientes tiene un presupuesto de 2.196,9 millones (31,26% más), con un aumento significativo para Salud Pública (23 millones). La Gerencia Regional de Salud dispondrá de 1.268 millones, con incrementos en todas las áreas de actuación y especial mención a la protección de los trabajadores en el contexto de la pandemia, mediante la compra de equipos y material adecuados.
El Capítulo III -gasto financiero- contará con 61.180 euros, y el Capítulo IV -transferencias corrientes- con 753 millones, casi 138 más que el año anterior. Por lo que se refiere al Capítulo VI -inversiones reales-, el presupuesto para 2021 incluye una partida de 157,31 millones, un 10,4% más, y aumenta en todos los programas y subprogramas. Los otros dos capítulos restantes, el VII y el VIII, poseen una dotación de 650.000 y 966.314 euros respectivamente.
Salud Pública
El programa referido al área de Salud Pública es uno de los grandes protagonistas del presupuesto para 2021. Para la titular de Sanidad, “este año ha quedado patente para el conjunto de la sociedad que si no poseemos un sistema de salud pública potente no seremos capaces de afrontar los retos sanitarios y epidemiológicos que la globalización pone ante nosotros”. Por ello, el reforzamiento de este servicio era una asignatura pendiente en Castilla y León, de ahí que la partida global dedicada a esta materia crezca un 16,62 %, alcanzando un presupuesto de 86,15 millones de euros.
Cabe destacar la importante cuantía destinada a la compra de vacunas, con un aumento del 64,58 %, pasando de 12,9 millones de euros a 21,2 millones. Este incremento presupuestario permitirá abonar los gastos de vacunas como el meningococo B o la meningitis tetravalente, y disponer de más dosis tanto para menores de edad como para personas vulnerables o de riesgo.
Otro apartado a destacar es la subida presupuestaria del capítulo dedicado a inversiones reales, con un aumento del 8,65 % y que tiene como principal fin introducir nuevos cribados congénitos durante el año 2021. Así, se van a poner en marcha tres nuevas pruebas en el programa de detección de enfermedades congénitas: la Enfermedad de la orina con olor a jarabe de arce, la Homocistinuria y la Acidemia isovalérica.
Este aumento presupuestario del programa de Salud Pública también viene a cumplir con varios de los puntos relativos a este ámbito marcados por los expertos designados por los grupos firmantes del “Pacto para la recuperación económica, el empleo y la cohesión social”, que van desde el aumento de la inversión global en Salud Pública a final de legislatura, hasta mejorar los recursos de los que disponen sus servicios territoriales o la mejora de sus sistemas de información.
En cuanto al programa de Investigación en la Administración General, se destinan 813.000 euros (aumento del 22,6 %), destacando los proyectos centrados en enfermedades raras y en investigaciones sobre vigilancia de la salud epidemiológica.
Atención Primaria
Para la Atención Primaria, la partida general de la Consejería de Sanidad aumenta un 19,4 % en relación a los anteriores presupuestos, pasando de una cuantía de 1.188,57 millones a 1.419,4 millones, con el objetivo central de aumentar la capacidad resolutiva de este nivel a finde evitar demoras en el diagnóstico, mejorar la actuación precoz y evitar desplazamientos innecesarios de los pacientes.
En total, Atención Primaria, descontando la partida relativa a farmacia, supone un 18,8% del gasto total de este presupuesto si se suman todas las partidas que directa e indirectamente tienen impacto sobre este nivel asistencial. Verónica Casado ha recordado que “ el compromiso adquirido por los dos partidos que conforman el Gobierno de Castilla y León es alcanzar a lo largo de la legislatura el 20% del gasto total, por lo que con este aumento desde un 16%, vamos en muy buen camino”.
Como elemento a destacar, se produce un incremento importante en lo referido a los gastos de personal, con un 19,26 % más, casi 100 millones de euros. “Somos conscientes -ha dicho la consejera- de que debemos aumentar plantillas, pero que también debemos mejorar las condiciones laborales de nuestros profesionales”.
En cuanto a las inversiones reales, hay un aumento del 41 %, pasando de 15 a 21 millones. Se continuarán las obras de reforma o ampliación en los centros de salud de Arévalo, Madrigal de las Altas Torres, Cebreros, Salas de los Infantes, Bembibre, Sahagún, El Ejido, San Andrés del Rabanedo, Villaquilambre, Aguilar de Campóo, Venta de Baños, Calzada de Valdunciel, El Zurguén, Segovia IV, Cuéllar, Soria Norte y Parada del Molino. También hay partidas concretas para la construcción de nuevos centros de salud: Burgo de Osma, Alaejos y Medina de Rioseco.
Hay que resaltar que dado que algunos de los proyectos que ya están en fase de remodelación o construcción tienen paralizada la construcción o están en proceso de resolución de contrato, o bien todavía no se han podido presupuestar las cuantías para algún otro centro de salud adicional que hay que construir, Sanidad ha establecido una partida general de obras en centros de salud que permitirá retomar o iniciar nuevos proyectos.
Este aumento de inversión en Atención Primaria va a permitir desarrollar proyectos muy necesarios para adaptar el sistema a los retos y amenazas señalados antes, como por ejemplo la creación de las Unidades Administrativas de Área de Atención Primaria, que tiene como objetivo transformar el modelo actual basado en la demanda del paciente y respuesta del médico a otro basado en necesidades de salud y abordaje multidisciplinar, creando circuitos claros, eliminando burocracia y organizando mejor las tareas administrativas.
Otras líneas de actuación serán la mejora de la atención en el medio rural, que precisará de inversiones en consultorios y centros de salud, o mejorar la accesibilidad y la eficacia de la atención al usuario con inversiones en sistemas de información, especialmente la accesibilidad de las personas con discapacidad intelectual o sensorial, ya sea adaptando instalaciones, incorporando elementos que mejoren la orientación y la interpretación, facilitando el acompañamiento por intérpretes o mejorando actuaciones en materia de prevención, como por ejemplo en salud bucodental.
Se van a desarrollar varios proyectos relativos a la Salud Mental, como trabajar en la formación y apoyo a los profesionales de Atención Primaria por parte de los Equipos de Salud Mental, a través de la implantación de procesos asistenciales sobre los problemas más prevalentes. Y en relación con el Plan de Atención al Suicidio, se potenciará la actuación de este nivel, con especial atención a la población infanto-juvenil. O nuevos problemas en el ámbito de la salud mental aparecidos tras la pandemia, que hacen necesario impulsar la formación en tratamientos, tanto para el personal sanitario como de servicios sociales.
Este presupuesto va a permitir, también, dar cumplimiento a varios de los acuerdos recogidos en el Pacto de recuperación económica, el empleo y la cohesión social en materia de Atención Primaria:
- -Elaborar un plan de recursos humanos que cubra necesidades actuales y futuras.
- -Establecer plantillas mejor dimensionadas con cupos máximos de tarjetas sanitarias.
- -Potenciar la incorporación de profesionales en puestos de difícil cobertura.
- -Mejorar los sistemas de cita previa.
- -Mejorar la accesibilidad al sistema.
- -Mejorar la dotación en equipamiento y conectividad en centros de salud y consultorios haciéndoles más resolutivos.
- -Mejorar la formación del personal administrativo en tareas de gestión de la demanda.
- -Mejorar los equipos de atención domiciliaria.
- -Mejorar los sistemas de información de Atención Primaria.
Atención hospitalaria
El apartado de Atención Hospitalaria dispondrá de un presupuesto de 2.621,3 millones, un 23 % más (400 millones más sobre 2018). Al igual que en Atención Primaria, la partida destinada a gastos de personal aumenta, en este caso un 16,7 % hasta alcanzar los 1.344,4 millones, lo que permitirá también reconocer la carrera profesional y hacer más atractivas estas plazas.
En lo relativo a transferencias corrientes, se aumenta un 33,9 % hasta los 1.134 millones. Cabe destacar aquí la cuantía para material de laboratorio, que aumenta en casi 100 millones y que va a permitir nuevos equipos y reactivos para tener una mejor capacidad diagnóstica.
Hay un incremento del 71,4 % en inversiones, llegando a los 70,8 millones para compra de equipamientos. Destaca una cuantía específica de 14 millones en material COVID, así como las siguientes obras/proyectos: redacción tanto del proyecto básico como el de ejecución del nuevo Hospital de Aranda de Duero; traslado al nuevo edificio y terminar de adquirir el equipamiento sanitario y mobiliario del nuevo Complejo Asistencial Universitario de Salamanca; obra para la nueva UCI de Bioseguridad del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid; obras del bunker para el nuevo acelerador linear del Complejo Asistencial Universitario de León; continuar con las obras del Complejo Asistencial de Soria en su Fase 2; y licitación para construir el nuevo edificio de consultas externas en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid.
Se contempla, además, la dotación necesaria para renovar equipamiento clínico y alta tecnología médica, entre lo que destaca la sustitución de dos equipos de Rayos X, un telemando y un angiógrafo de hemodinámica en el Complejo Asistencial Universitario de León y sustituir una Resonancia Magnética en el Hospital de Segovia.
Además, al igual que con Atención Primaria, y dadas las dificultades para poder cuantificar más al detalle algunos proyectos en este ámbito, se ha presupuestado una partida general para obras en centros hospitalarios que supera los 18,6 millones de euros.
La consejera de Sanidad ha querido hacer especial mención a su firme compromiso en la lucha contra el cáncer y con las unidades de radioterapia anunciadas. Por ello, los presupuestos recogen partidas específicas para las unidades satélites de Ávila, El Bierzo, Segovia y Soria.
Por lo que se refiere a proyectos novedosos para 2021, destaca el Plan estratégico de Medicina Personalizada de Precisión de Castilla y León, que pretende detectar características genómicas y moleculares del cáncer que permitan establecer tratamientos específicos para cada paciente, dirigidos a esas alteraciones que provocan el desarrollo del tumor, haciendo que sean más eficaces y menos tóxicos.
Además, esta tecnología permitirá el desarrollo de un programa de detección de enfermedades raras con base genética o molecular. Con este plan se quiere crear una red multidisciplinar en la región que incluya el análisis de laboratorio, los aspectos diagnósticos y terapéuticos.
Emergencias sanitarias
En el área de atención a las emergencias sanitarias, el presupuesto 2021 prevé la puesta en marcha de un sistema más ágil y eficaz para dar cobertura a la patología tiempo-dependiente, para lo cual se aumenta un 66,9 % la inversión en personal hasta alcanzar los 22,4 millones, y otro 22,37 % en infraestructuras.
Destaca la intención de establecer una nueva ubicación para el Centro Coordinador de Urgencias (CCU) de Castilla y León, así como implantar más de 80 nuevos recursos móviles, entre los que destacan 42 soportes vitales avanzados, aumentando las unidades asistenciales de emergencias en un 52,5 % respecto a las ya existentes.
También se mejorarán las Unidades Medicalizadas (UME) con acceso a la historia clínica electrónica y dotándolas de ecógrafos portátiles y de analizadores sanguíneos portátiles, lo que permitirá que sean mucho más resolutivas, facilitando un mayor tiempo de disponibilidad.
Pero, además, para garantizar la atención inmediata sobre todo en el medio rural y en una comunidad tan dispersa, se va a dotar a los PAC de un sistema de telepresencia que permita la interconexión entre niveles asistenciales con el objeto de que las necesidades de atención urgente de los ciudadanos se resuelvan desde un sistema de atención integral en red. Un ejemplo de ello será la potenciación del programa de tele-ictus, la atención a infartos o atención a urgencias pediátricas.
Estos puntos coinciden también con numerosas de las propuestas expresadas por los expertos designados por los partidos políticos firmantes del citado pacto para la recuperación el pasado mes de junio.
Investigación y telecomunicaciones
Por su parte, el programa de Investigación cuenta con una partida de 7 millones de euros, y en él destaca el diseño de las líneas estratégicas en investigación/innovación de la Gerencia Regional de Salud 2021-2025, con la redefinición de las Unidades de Apoyo a la Investigación y la implementación del proyecto europeo INNHOSPITAL.
En el apartado de las telecomunicaciones, el aumento de la partida presupuestaria supone un 15,7 % en relación a las cuantías previas, alcanzando los 41,1 millones de euros. El objetivo es prestar una mejor y más cercana asistencia, limitando en gran medida los desplazamientos, así como mejorando la coordinación y colaboración de los profesionales en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades.
En este próximo ejercicio se va a potenciar, aún más si cabe, la integración y mejora de todos los sistemas de información. Se dará un impulso a las herramientas TICs de ayuda a los profesionales con la extensión de Jimena 4 a todos los hospitales, así como la implantación del gestor de petición de radiología, el escritorio del profesional o el módulo de vacunas, que estará disponible antes de comenzar la vacunación del SARS-cov-2.
Además, se iniciará la implantación del sistema corporativo de información de laboratorio, que permitirá el trabajo en red entre los laboratorios de la organización y disponer, entre otras cosas, de un sistema de información microbiológica, crítico para tomar decisiones como se ha visto durante estos meses.
Se ampliará el Observatorio del sistema sanitario de Castilla y León, incorporando indicadores a nivel de servicio hospitalario y resultados en salud. Este proyecto estará asociado al desarrollo del denominado Business Intelligence, que facilitará la toma de decisiones y la mejora en todos los niveles. Poder comparar servicios, actividad, tasas de supervivencia, letalidad, complicaciones, enfermedades nosocomiales, etc. va a permitir ser un mejor sistema de salud.
El avance de las tecnologías de la información no sólo va a permitir mejorar el intercambio de información entre profesionales y niveles asistenciales, sino que también supondrá dar un paso de gigante en la accesibilidad al sistema sanitario de todos los ciudadanos.
Por ejemplo, ya se están poniendo en marcha programas de telepresencia en enfermedades tiempo dependientes, que se van a extender a especialidades que tienen que ver con patologías no urgentes, como teledermatología, telepediatría, etc. La idea es que exista un mejor acceso a determinadas especialidades en zonas muy alejadas de los hospitalarios o que los profesionales de Atención Primaria puedan citar, junto a otros especialistas, a un paciente para valorar conjuntamente un problema determinado de salud.
Formación
Con el objetivo de seguir aumentando las plazas acreditadas para formación de especialistas, también en centros de Atención Primaria rurales y hospitales comarcales, y de incentivar a los profesionales para transmitir sus conocimientos a estos estudiantes, Sanidad aumentará la partida de formación de internos residentes en un 26,83%, hasta alcanzar los 75,68 millones de euros. Se trata de objetivos fundamentales del Pacto para la recuperación económica, el empleo y la cohesión social en la parte relativa a formación.
Así, en el examen de especialistas para el año 2019 la Comunidad ofertó 454 plazas, que se incrementaron a 583 en 2020, al poco de llegar este nuevo equipo, y de cara al próximo examen de especialistas, en marzo de 2021, se van a ofertar al menos un total de 631 plazas, incrementando sobre todo las especialidades deficitarias.
CHEMCYL
Por último, el presupuesto para 2021 incluye una partida de 19,7 millones para dotar a la Fundación del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León (Chemcyl), que aparte de la donación de sangre y la obtención de hemoderivados tiene en marcha importantes programas como el biobanco, banco de tejidos, banco de leche materna, cribado neonatal, programa de garantía externa de calidad de laboratorios de inmunología (GECLID) y programa de garantía externa de calidad para cribado neonatal (GECCN).
La consejera de Sanidad ha querido concluir su intervención dando algo de perspectiva a estas ingentes cantidades de dinero público, recordando a los ciudadanos lo que cuestan las interacciones que suelen tener con su sistema sanitario y de lo que en muchas ocasiones no son conscientes cuando se usa. Así, ha explicado que la visita al médico de familia tiene un coste medio de 23 euros, un día en la UCI supone un coste de 1.383 euros, 2.200 un parto sin complicaciones, 3.100 operar una catarata o 144.000 un trasplante cardiaco.