El 13 de septiembre, las ocho residencias juveniles de laJunta de Castilla y León, entre las que se encuentra la residencia Doña Urracade Zamora, comenzarán a recibir a los estudiantes para el próximo curso2020/2021, contando para ello con todas las medidas de seguridad y losprotocolos sanitarios reglamentarios contra el COVID-19. De hecho, en lospróximos días se irán incorporando a estas instalaciones cerca de 450 jóvenes,algo más de la mitad de las plazas que habitualmente se convocaban, ya quedebido a la situación sanitaria y siguiendo las indicaciones de la Consejeríade Sanidad, este año se ha reducido el aforo y todas las habitaciones han pasadoa ser de uso individual.
Asimismo, el Instituto de la Juventud ha elaborado una guíaen colaboración con la Dirección General de Salud Pública que recoge lasmedidas de seguridad y limpieza que deberán aplicarse a lo largo de este curso.Dicho documento incluye también el protocolo a seguir ante posibles casos decoronavirus sospechosos o confirmados tanto de residentes como del personal.
Precisamente, las residencias están dotadas del materialnecesario para garantizar una estancia segura y para ello cuentan contermómetros sin contacto, alfombras desinfectantes, dispensadores de gel paralas zonas comunes e incluso se han establecido itinerarios seguros dentro delas distintas instalaciones. Además, los residentes antes de iniciar su estanciaen la residencia, deberán firmar una declaración responsable y cumplir contodas las medidas e indicaciones que sean necesarias en cada momento.
Los usuarios podrán incorporarse a las residencias hasta eldía anterior al inicio de las clases y con el fin de preservar su seguridad yla de los trabajadores, ninguna persona que no se aloje en el centro podráacceder al mismo ni tampoco se admitirán alberguistas individuales durante elprimer trimestre.
Además, conscientes de las dificultades por las que atraviesanalgunas familias, la Junta de Castilla y León contempla ventajas para losusuarios de las residencias juveniles de su titularidad, ya que en el caso deque los miembros de la unidad familiar se hayan visto afectados por un despido,cese de actividad o expediente de regulación de empleo temporal (ERTE) en 2020,dispondrán de beneficios en el abono de las cuotas, ya que se valorará lacapacidad económica del presente año y no la del anterior ejercicio como veníasiendo habitual.