Una llamada a la solidaridad surgió la pasada noche del jueves en Zamora para facilitar los recursos médicos en esta crisis sanitaria. La tecnología iba a ser la clave de esta cadena de favores ya que se necesitaban impresoras 3D para la creación de viseras anti salpicaduras. Esta medida ya había llegado a otros puntos de España y Alberto Luengo propuse su continuidad en Zamora.
Tras trasladar esta iniciativa a los medios de comunicación la respuesta de los zamoranos no se hizo esperar. A través de un grupo de Telegram, que cuenta ya con casi 100 miembros, comenzaron a organizarse para ponerse a trabajar lo antes posible, conociendo los diseños y algunas pautas para conseguir estas viseras anti salpicaduras.
Uno de los colaboradores es un joven zamorano que no dudó en colaborar: “Decidí colaborar para ayudar en lo que se pueda, si es aportando un poco de mi tiempo y los recursos de los que dispongo para un hobby, mejor estarán empleados al servicio de nuestros sanitarios, servidores públicos y enfermos".
Este colaborador nos desgrana el proceso de creación: "Comienza parametrizado el modelo de impresión, ya que este debe de ser ajustado según cada impresora, (que no debería de tardarse más de unos diez minutos), tienes que preparar la impresora si es que no la tenías en uso y eso supone cinco minutos más".
"Estamos hablando de que en 15 minutos si no hay problemas, puedes arrancar a imprimir, en este caso, soportes para crear pantallas protectoras. El tiempo de impresión varía entre cada modelo de impresora 3D y configuración, ya que en la configuración hay que ajustar tanto velocidades como soportes, cantidad de relleno o infill, si necesitas retracción etc... Para este caso, las impresiones deberían de estar entre una y dos horas, dependiendo de cuantas puedas imprimir a la vez. En mi máquina, puedo sacar dos soportes cada hora y 23 minutos".
En cuanto a los materiales hay diferentes en el mercado, el más usado es PLA, también se emplea laca para fijar la pieza en la placa de impresión y acetona para limpiarla después de retirar las piezas. Nos explica que este proceso para él "no ha resultado difícil" puesto que lleva ya bastante tiempo en el mundo del 3D.
Además, anima a los menos experimentados a colaborar "ya que el diseño es sencillo y carece de partes que sean complicadas de orientar. Para alguien que acabe de empezar no supone ningún reto especial frente a cualquier otra pieza".
Los organizadores de esta iniciativa piden a todos aquellos que tengan una impresora 3D que se pongan en contacto a través del canal de Telegram https://t.me/joinchat/J7X6-hvZ-Hv-iR0G5_TPKw o mediante correo electrónico a covid19zamora3d@gmail.com.