La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha analizado este jueves la situación de Zamora en esta segunda ola de coronavirus señalando que la provincia “tuvo una primera etapa muy buena pero ahora nos preocupa mucho con una incidencia acumulada de más de 900 casos”.
Casado ha resaltado que a mayor parte de los brotes que se están produciendo son de carácter sociosanitario, algo preocupante porque afectan a población muy frágil pero también por otro lado hay una mayor trazabilidad a la hora de detectar los casos.
No obstante, la consejera ha destacado su preocupación por la situación del hospital puesto que la ocupación se sitúa por encima del 90% aunque ha querido ser optimista con las nuevas medidas impuestas y el toque de queda creyendo que “va a ser un balón de oxígeno” para e hospital.
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